El grupo francés de
telecomunicaciones Bouygues Telecom anunció ayer que
presentará su candidatura a una licencia de telefonía móvil de
tercera generación (UMTS), tras haber negado reiteradamente
esta posibilidad.
La francesa, que decidió
retirarse del primer proceso por considerar que los precios de
las licencias eran excesivamente altos (4.950 millones de
euros), había negado en repetidas ocasiones cualquier
posibilidad de volver a optar a una licencia, aun cuando el
gobierno galo decidió rebajar el precio de estas (a 619
millones de euros más un canon del 1% de los ingresos) y
cambiar algunas de las condiciones del proceso. En la
actualidad sólo dos compañías Orange (France Telecom) y SFR (Vivendi
Universal) poseen licencias 3G francesas, aunque quedan
pendientes de entrega dos más.
Bouygues presentará su demanda de candidatura el próximo 16 de
mayo, día en que finaliza el plazo para hacerlo, y la
Autoridad de Regulación de las Telecomunicaciones (ART) deberá
emitir un dictamen sobre su aceptación o no el 30 de
septiembre como muy tarde, con lo que si se le atribuye,
Bouygues Telecom tendría su licencia a finales de noviembre.
La compañía explota actualmente una de las tres licencias de
telefonía móvil GSM en Francia, además de ser el principal
accionista del canal de televisión TF1.
Con todo, la francesa ha cambiado de parecer y ahora parece
que sí le salen las cuentas para afrontar el despliegue del
servicio 3G. Pero detrás de este cambio hay un nombre: NTT
DoCoMo. Bouygues ha firmado con el líder japonés un acuerdo
para habilitar el servicio i-mode en Francia. Se desconocen
los términos financieros del contrato, pero está claro que el
hecho de tener detrás al gigante nipón, cuyo sistema ya ha
sido habilitado en Alemania y en Holanda a partir de hoy.
sábado mayo 24, 2014 |