La actualidad - índice actualidad

La era digital trae consigo el Síndrome Ocular del Ordenador, que afecta, actualmente, a la mayor parte de la población.

Como consecuencia del empleo masivo de los ordenadores y todo tipo de pantallas o monitores, el siglo XXI trae consigo una nueva dolencia, el llamado Síndrome Ocular del Ordenador, que afecta a la mayor parte de la población.

En la oficina, la adaptación constante a diferentes intensidades de luz y distancias implican numerosos cambios en la fijación y dirección de la vista. Esto puede provocar la extenuación ocular y dar como resultado una serie de síntomas, tales como sensación de ardor, irritaciones diversas, lagrimeos, visión borrosa y frecuentes dolores de cabeza.

Estos síntomas, en un principio sin importancia, pueden desembocar en patologías como ojo seco, errores refractivos y disfunciones binoculares, que sí necesitarán de tratamiento oftalmológico. Para evitar que estas manifestaciones aparezcan, Real Vision, clínica oftalmológica dedicada a la corrección quirúrgica de los defectos de la visión, ofrece una serie de consejos que el usuario informático debe llevar a cabo en su puesto de trabajo.

Las imágenes que nos ofrecen los monitores están compuestas de muchos puntos minúsculos que, realmente, no ofrecen una representación clara de las figuras. Esto obliga a enfocar la visión una y otra vez y pestañear con mayor frecuencia, razones por las que aumenta el esfuerzo ocular.

Para evitar estas molestias en la mayor medida posible, es importante tener un monitor de gran calidad, que presente la mayor resolución posible. Asimismo, cuando la lubricación del ojo es inferior a lo normal, es decir, se sufre de ojo seco como consecuencia o no de la exposición permanente a la pantalla del ordenador, es muy recomendable, además de un parpadeo superior, la utilización de gotas oftalmológicas.

En palabras del doctora Teresa Dapena de Real Vision, “para evitar la aparición de muchas de estas dolencias, provocadas por estar ante una pantalla muchas horas al día, es necesario tomar descansos de 10 a 15 minutos cada hora de exposición y orientar la mirada hacia un objeto distante”.

También es importante contar con una iluminación adecuada. Existe la creencia generalizada y totalmente errónea de que la utilización de una gran iluminación es beneficiosa en los lugares de trabajo. Ante todo, se debe evitar el deslumbramiento, es decir, que la luz pueda incidir directamente tanto en los ojos, como sobre la pantalla del ordenador. Uno de los errores más frecuentes es la utilización de muchas fuentes diversas de iluminación, que pueden desviar la atención de los ojos frente al monitor o causar reflejos en la pantalla.

Para evitar reflejos que impidan una correcta visión de la pantalla ha de evitarse, también, el tener una ventana detrás del monitor o a un lado de éste. Asimismo, pueden utilizarse filtros antirreflectantes para monitores. Es conveniente además un óptimo emplazamiento del monitor que, por ejemplo, debe estar levemente inclinado hacia atrás y a una distancia del usuario de unos 50 cm.