Si hace pocos días publicábamos una denuncia de Telefónica de
Argentina sobre robo de tendidos de cable, ahora la operadora
muestra su preocupación por el aumento del vandalismo contra
los teléfonos públicos.
La compañía
indicó que en los cuatro primeros meses del año tuvo que
retirar del servicio más de 600 teléfonos públicos por robo o
destrucción del terminal telefónico, lo que significa un
aumento del 40 por ciento en relación al mismo periodo del año
anterior.
Según los datos facilitados por la propia operadora, dos de
cada diez teléfonos públicos instalados en la capital y las
áreas próximas se encuentran fuera de servicio debido a
reiterados actos de vandalismo.
En el interior del país, los índices de violencia sobre la
planta instalada de teléfonos públicos, registran su mayor
impacto en Mendoza, San Juan y Mar del Plata. En Mendoza y San
Juan los hechos delictivos contra teléfonos públicos se
empezaron a agudizar en diciembre de 2001 y han aumentado un
80 por ciento en relación con el mismo periodo del año
anterior.
En Mendoza durante el mes de abril se vieron afectados más de
100 teléfonos públicos, el seis por ciento del total. En San
Juan se han visto afectados el ocho por ciento de los
teléfonos instalados.
La operadora señala que los ataques, que van desde la rotura
de vidrios o partes del soporte telefónico, hasta robos del
aparato telefónico, pasando por cortes intencionados de cables
e incendios, están afectando "seriamente" al servicio.
Actualmente, la compañía posee más de 77.000 líneas instaladas
entre teléfonos públicos y semipúblicos.
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sábado mayo 24, 2014 |