Casi la mitad de la programación infantil de la televisión
abierta en Chile es de baja calidad, es decir que contiene
lenguaje inapropiado, elementos de violencia o contenidos
sexuales no aptos para niños, independientemente de que además
contengan elementos educativos.
Sólo el 12 por ciento de los programas para niños en la
televisión abierta son de alta calidad -con contenidos
educativos, y sin violencia, sexualidad inadecuada o lenguaje
inapropiado- y el 40 por ciento es de calidad media -con
contenidos educativos pero acompañados por elementos de
violencia o lenguaje inapropiado- según el Estudio sobre
Calidad de la Programación Infantil en TV Abierta y por Cable,
realizado por el Consejo Nacional de Televisión entre marzo y
abril de 2001.
La investigación evaluó la calidad de la programación infantil
sobre un total de 344 emisiones equivalentes a 122 horas de
transmisión. En la televisión por cable, más de un tercio (36
por ciento) es de baja calidad, el 40 por ciento es de calidad
media y el 24 por ciento es de alta calidad. El cable, sin
embargo, tiene señales muy diversas, algunas de las cuales
incluyen una gran mayoría de programas de calidad media y
baja, en tanto en otras predomina la programación de alta
calidad.
El 66 por ciento de los programas en ambos sistemas presentó
contenidos de violencia en al menos una de las emisiones
consideradas, en tanto el 34 por ciento no tuvo contenidos de
violencia en ninguna de sus emisiones. El cable aventajó en
este sentido a la televisión abierta: el 38 por ciento de sus
programas no mostraron nunca violencia, frente al 22 por
ciento de los canales abiertos.
Respecto de los contenidos de sexualidad inapropiada, se
encontraron en el 6 por ciento de los programas en televisión
abierta y por cable. La investigación, además, reveló que el
64 por ciento de los programas incluyeron lenguaje inapropiado
para niños: esto sucede en las tres cuartas partes de los
programas por televisión abierta y en el 61 por ciento de los
programas infantiles del cable. Un alto porcentaje de los
programas, el 41 por ciento, carece por completo de contenidos
educativos (40 por ciento en el cable, 48 por ciento en la
televisión abierta). Mientras un 60 por ciento de los
programas de cable exhiben algún contenido educativo al menos
en uno de sus capítulos, esto sucede sólo en el 52 por ciento
de los casos en la televisión abierta.
Por otra parte, la programación infantil incluye la valoración
de conductas positivas: sobre todo cooperación y ayuda a los
demás, expresión transparente de sentimientos,
responsabilidad, honestidad y respeto, en tanto entre las
conductas negativas exhibidas predominan la conducta
irrespetuosa y la deshonestidad.
En 1997, un primer estudio sobre "La Programación Infantil de
Televisión Abierta: Características, Calidad y Potencial
Educativo" había evaluado los contenidos de la programación
infantil en los canales de aire, midiendo tanto su calidad
como su potencial educativo
http://www.comminit.com/la/ladicen/sld-1122.html
sábado mayo 24, 2014 |