El grupo alemán Siemens ha suprimido
780 empleos adicionales en dos de sus fábricas en Alemania,
dentro del proceso de reestructuración que está llevando a
cabo la compañía por "la caída dramática de la demanda",
informó la empresa.
Siemens cerró su fábrica de Greiswald, del Este del país,
especializada en la fabricación de productos de telefonía
numérica, en la cual trabajan 330 empleados. La división de
investigación y desarrollo de la planta, que cuenta con 175
trabajadores, continuará sus actividades.
La otra fábrica que la compañía cerrará parcialmente es la de
Bruchsal (en el Oeste), donde suprimirá 350 empleos al cerrar
la planta de producción de accesorios de las técnicas ADSL. EP
sábado mayo 24, 2014 |