Anna Birulés, doctora en Ciencias
Económicas por la Universidad de Barcelona, ha cesado en su
cargo como ministra de Ciencia y Tecnología, en plena reforma
de la Ley General de Telecomunicaciones.
Birulés asumió el cargo tras la creación del Ministerio en la
primavera de 2000, afrontando el reto, entre otros, de
culminar la liberación del sector de las telecomunicaciones.
Directora general desde octubre de 1997 de Retevisión,
compañía creada por el Gobierno para impulsar la
liberalización, desempeñó diversos cargos en la Consejería de
Industria de la Generalitat de Cataluña, entre ellos los de
directora general de Promoción Comercial y del Centro de
Información y Desarrollo Empresarial (CIDEM). Asimismo, fue
presidenta del Consorcio para la Promoción Comercial de
Cataluña y de la Sociedad Catalana de Capital Riesgo.
En 1995, Birulés fue nombrada secretaria general del Banco de
Sabadell y miembro de su comisión ejecutiva. Asimismo ha sido
consejera de Solbank SBD, Sistema 4B y Sociedad Rectora de la
Bolsa de Valores de Barcelona.
Durante su gestión al frente del Ministerio de Ciencia y
Tecnología, Birulés ha atravesado por dos épocas muy
diferentes: La primera, caracterizada por la euforia en torno
a los valores tecnológicos, y la segunda, marcada por la
crisis que afecta el sector de las telecomunicaciones y la
tecnología. Asimismo, ha tenido que hacer frente a las
posturas contrapuestas de Telefónica y sus competidores.
A lo largo de su andadura, el Ministerio de Ciencia y
Tecnología ha hecho especial hincapié en el desarrollo de la
Sociedad de la Información, insistiendo en la importancia del
uso de Internet.
También, ha gestionado el reparto de las licencias de UMTS
(que se hizo un día después de las elecciones del 12 de marzo
del 2000), la transición de la televisión analógica a la
digital y, en el último año, la revolución de la banda ancha a
través de
la tecnología ADSL, que adapta las redes de cobre
convencionales a los nuevos servicios avanzados de
telecomunicaciones.
Su Ministerio también ha vivido la explosión del negocio de
los mensajes de telefonía móvil y la desilusión por el retraso
de la puesta en marcha de la telefonía móvil de tercera
generación (UMTS), motivado por el lento desarrollo de la
tecnología necesaria y, sobre todo, por un mercado aún no
preparado para hacer rentables los nuevos servicios que traerá
consigo.
Este Ministerio ha puesto en marcha Info
XXI, un plan estratégico que pretende impulsar el desarrollo
de la sociedad de la información y el uso de las nuevas
tecnologías.
Entre sus logros más destacados en este sector figuran las
iniciativas para favorecer fiscalmente a las empresas
inversoras en innovación tecnológica y créditos blandos.
La ministra se ha enfrentado, además, a la polémica que generó
la ley marco de internet, LSSI, promovida por su departamento,
repudiada por la oposición e importantes sectores
empresariales del sector. El gran defensor de la iniciativa,
Borja Adsuara, no se libró de una fuerte polémica, al ser
contrario su nombramiento con las normas que regían el acceso
a ciertos cargos por funcionarios de carrera.
La crisis de Quiero TV, la primera Televisión Digital
Terrestre, en plena liquidacíón afecto de lleno al Ministerio,
más cuando el proyecto fue gestado en su epoca de directiva de
Retevisión.
Asimismo, ha apostado por el fomento de la investigación, la
innovación y el desarrollo, tratando de acortar la distancia
que separa a España de la media de la Unión Europea.
La ministra ha "intentado responder" a las demandas de los
científicos, aumentar su número, recuperar "cerebros" del
extranjero y dotar al sistema de una mayor flexibilidad y
movilidad.
En sus dos años al frente del departamento, logró sacar
adelante el Programa Ramón y Cajal, que permitió el pasado año
la incorporación de unos 800 nuevos investigadores a los
centros públicos de investigación y universidades, y de otros
600 en el presente ejercicio.
No obstante numerosos colectivos de jóvenes investigadores y
científicos consolidados manifestaron sus críticas a la
gestión de Birulés, a quien pidieron mayores recursos
económicos y humanos, así como una planificación más ordenada
Otras cuestiones que ha tratado durante su etapa al frente de
Ciencia y Tecnología han sido la polémica de la clonación, el
uso de células madres, o la crisis suscitada por las emisiones
de las antenas radioeléctricas. Agencias y Redacción
sábado mayo 24, 2014