El presidente del grupo Telefónica, César
Alierta, anunció hoy que la compañía mantendrá sus licencias
de telefonía móvil de tercera generación (UMTS) y que con la
congelación de sus actividades en este área prevé evitar unas
pérdidas de 2.374 millones de euros hasta 2005.
Así, en una presentación a analistas para explicar los
resultados del primer semestre, explicó que la paralización de
las operaciones de UMTS en Europa librará a Telefónica de unas
pérdidas operativas de 1.802 millones de euros en el periodo
2002-2005, y de unas pérdidas netas de 2.374 millones en las
mismas fechas.
Asimismo, el grupo Telefónica estima que los costes de
reestructuración derivados de esta decisión ascenderán a 287,2
millones de euros. Telefónica insistió en que la nueva
valoración de activos supondrá una mejora de capacidad de
generación de flujos de caja.
Este efecto positivo se debe a que la revisión del valor de
las licencias no supone una salida de caja y los flujos de
caja previstos para los próximos años, tras descontar los
gastos asociados a la reestructuración de las operaciones UMTS,
se verán incrementados por la eliminación de los resultados
operativos y la reducción de las inversiones. EP
sábado mayo 24, 2014 |