Divas de la farándula argentina, como la presentadora y actriz Susana
Jiménez, la actriz venezolana Catherine Fulop o la cantante uruguaya Natalia
Oreiro, recurren siempre al programa de Photoshop para el retoque de sus fotos
publicadas.
La "magia" de la cirugía estética virtual que se hace sobre las fotos de las
importantes féminas se llama Photoshop, un programa de corrección de imagen que
los famosos lo usan cuando la dieta y la gimnasia son insuficientes.
El Photoshop, la "máquina de embellecer", es la nueva salvación moderna para
corregir los pequeños detalles que podrían perjudicar la imagen y fotogenia de
importantes estrellas de la televisión y la música.
El programa está concebido como una herramienta que mejora la calidad de las
fotos, pero esa ingenua utilidad inicial tiene en la actualidad otras funciones
"estéticas", según un reportaje publicado en la prensa local argentina.
La conductora de televisión Susana Giménez, según el reporte, dista de
ser tan delgada como se la ve en las revistas y tampoco tiene la piel tan lisa,
ni los tobillos tan finos. Este aspecto es conseguido a través del
"todopoderoso" Photoshop.
La actriz no deja jamás que ninguna revista publique una fotografía sin antes
pasar por el Photoshop. Algo semejante ocurre con la modelo Graciela Alfano,
quien es capaz de pasar cinco horas junto al ordenador de una redacción
viendo cómo retocan sus fotos .
Las zonas más modificadas son las caderas, las piernas, el abdomen, los senos y
son pocas las estrellas que se salvan del bisturí cibernético, ni siquiera la
top-model Valeria Mazza.
El rostro es otro punto débil y sujeto a la ayuda del Photoshop, por ejemplo, la
actriz Cecilia Roth en la última edición de la revista Caras parece que tuviera
20 años menos.
La actriz y cantante uruguaya Natalia Oreiro es otra con problemas y aunque
carece de arrugas todavía, porque tan sólo tiene 25 años, su cara presenta
muchos granitos y siempre hay que pasarle la "aspiradora" del Photoshop para
borrárselos.
Ella, como todas, se engolosinó con el método y pide que además le refuercen el
color de sus ojos, donde los quiere bien verdes y que conjuguen con la
turmalina, su piedra favorita.
El programa también es un método excelente para eliminar la celulitis sin
necesidad de la mesoterapia, del drenaje linfático, de las cremas reductoras,
todo se borra con esta herramienta ofreciendo un excelente resultado que seduce
a los lectores y levanta la envidia de muchas mujeres que también buscan la
manera de obtener estos resultados.
Por eso, cuando la venezolana Fulop, Flavia Palmiero, Moria Casán o Soledad
Silveyra posan semidesnudas, con la piel tan sedosa como la de un bebé, no es
fruto de una dieta maravillosa ni de un estilizado cuerpo obtenido gracias a
muchas horas de gimnasia, sino que obedece al "mágico" Photoshop y por
supuesto al hábil "retocador" que es capaz de hacer maravillas con ese programa.
¿Sucederá lo mismo con las divas españolas?
sábado mayo 24, 2014