Un jurado de una corte estadounidense declaró el martes inocente a una
compañía rusa de los cargos de violación de las leyes norteamericanas de derecho
de autor, al vender un software que permitía a la gente saltar la barrera
digital usada para proteger los libros electrónicos.
Agencias - La firma ElcomSoft Co. Ltd., con sede en Moscú, fue acusada en
una corte federal por violar el Acta Digital del Milenio de Derechos de Autor de
1998, al vender un programa que evade las protecciones digitales del software de
Adobe Systems Inc.
El juicio de dos semanas realizado en San José, California, fue el primer
proceso criminal bajo la polémica acta, que prohíbe la venta de tecnología usada
para romper las barreras digitales de películas formateadas, música y otros
programas.
El jurado conformado por ocho hombres y cuatro mujeres deliberó durante
aproximadamente dos días antes de llegar al veredicto el martes. El juicio se
centró en si ElcomSoft había violado "intencionalmente" la ley
estadounidense, dijeron los abogados de la defensa.
"Ellos nunca intentaron violar la ley", dijo el abogado de la defensa,
Joseph Burton.
"Aceptamos el veredicto del jurado", dijo Kevin Ryan, el abogado
estadounidense de California del Norte, en un comunicado. "Aunque estamos
decepcionados, también estamos complacidos de que el juez respaldó la
constitucionalidad del Acta Digital del Milenio de Derechos de Autor y la
jurisdicción que brinda EStados Unidos en estos casos", agregó.
El programa de ElcomSoft, que se vendió online durante un mes a mediados del
2001 por 99 dólares antes de que Adobe demandara, permitía a los usuarios hacer
copias de libros electrónicos, transferirlos a computadoras portátiles y que las
computadoras las leyeran en voz alta a los ciegos.
Los fiscales señalaron que el programa se asemejaba a una herramienta de pillaje
que podría ser usada para hacer copias ilegales de libros electrónicos.
El presidente de ElcomSoft, Alexander Katalov, testificó que no pensaba que el
programa, que es legal en Rusia, era ilegal en Estados Unidos. Aclaró que el
programa no estaba diseñado para ser usado para libros electrónicos que no
hubiesen sido adquiridos legalmente.
sábado mayo 24, 2014 |