Las operadoras temen que se reproduzcan los problemas de la pasada Nochebuena, con «atascos» y «retrasos»

Agencias - Las principales operadoras de telefonía móvil han multiplicado este año las ofertas que dirigen a sus clientes para que puedan felicitarse las pascuas de la forma más original conscientes de que la fiebre de los mensajes se ha apoderado de las navidades. Aunque durante la pasada Nochebuena miles de vizcaínos utilizaron los teléfonos fijos para transmitirse buenos deseos y los más apresurados echaron días antes sus christmas en los buzones, la Navidad de 2002 es, sin dudas, la más 'móvil'.

Ahora todo es más sencillo. A cambio de unas tarifas que oscilan entre 9 y 15 céntimos más IVA la llamada, cualquiera puede enviar a través de su móvil una original felicitación, acompañada, dependiendo de las prestaciones de cada aparato, de fotografías, logos y todo tipo de musiquillas.

La pasada Nochebuena fue un buen ejemplo. Sólo Euskaltel contabilizó el pasado día 24 en el País Vasco casi dos millones de mensajes cortos cuando la media diaria no supera los 1,2, explica el responsable de Prensa de la compañía. Joseba San Nicolás reconoce que el importante incremento obedece al envío de felicitaciones y advierte de que éstas «se multiplicarán en Nochevieja».

Para dar más brillo a su negocio, empresas como Vodafone invitan incluso a sus clientes a cambiar las costumbres tradicionales. Las navidades de postales corren un serio peligro. «Envía desde tu móvil uno de nuestros mensajes sorpresa. Sin sobres, sin sellos y sin cartero: dicho y hecho».

Hasta cierto punto. Tanto en Euskaltel como en Vodafone reconocen que sin llegar a saturarse, hubo momentos en que sus líneas trabajaron la víspera de Navidad al límite de lo imposible. «Las redes de los móviles son como las autopistas. Si todos salimos de vacaciones el mismo día y a la misma hora, los atascos son inevitables», razona el director de Comunicación de Vodafone, Jorge Gutiérrez.

Sorprendentemente, y pese al liderazgo que mantiene en el sector, los responsables de Telefónica Móviles explican que no conocieron «ningún problema», aunque algunos clientes de Movistar se han quejado a este periódico de que tuvieron que repetir varias veces la operación de envío o que los mensajes llegaron a sus destinatarios bastante más tarde de cuando los remitieron.

Sin embargo, los problemas para el próximo martes están garantizados. Euskaltel recomienda a sus clientes no llamar «inmediatamente después» de las doce campanadas y aconseja esperar, como mínimo, diez minutos. Gutiérrez va más lejos. Calcula que la entrada de Año Nuevo movilizará a millones de usuarios y que el tráfico será intensísimo, por lo que recomienda llamar dos horas antes de las doce o, si es después, esperar al menos media hora. «No será el caos de hace dos años, pero si nos ponemos a llamar todos nada más comermos las uvas, se bloquearán las líneas telefónicas fijas, las móviles... ¡Olvídemonos, por favor, de llamar a las doce en punto!»

Añade que este año las previsiones son si cabe más pesimistas porque a los mensajes cortos «hay que añadir los multimedias, cargados de voces, imágenes... Todo eso saturará aún más las líneas o ensanchará los 'furgones de cola'. Uno mandará su mensaje pero éste tardará en llegar bastante a su destinatario», admite el portavoz de Vodafone. Y es que, razonan las operadoras, «muchísimos vizcaínos vivirán los primeros momentos de 2003 pegados a la oreja».