De acusadores a acusados. El Partido Popular ha vuelto a dar
la vuelta a la tortilla. Tras ser acusado por Izquierda Unida de ser el
responsable de enviar el email con el video a todos los diputados de Izquierda
Unida y el PSOE, el portavoz del PP desmintió cualquier vinculación con el
hecho, aunque anunció que pedirá que se investiga si el partido de izquierdas
espió los equipos del partido del gobierno.
Las acusaciones fueron vertidas por el portavoz del Grupo Popular en el
Senado, Esteban González Pons, quien respondía a la información
ofrecida esta mañana por el coordinador de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares,
de que había sido una colaboradora de este senador quien había llevado a cabo el
bombardeo.
González Pons reconoció que su colaboradora había enviado ese "a una amiga" el
vídeo a través de "una comunicación privada, y para conocer esas comunicación
privadas, IU sólo lo ha podido hacer de tres formas: Accediendo directamente al
ordenador de mi colaboradora; dando publicidad de forma ilegal a una
comunicación privada que ella haya podido mantener y que no era con IU o
mintiendo, y las tres cosas me parecen igualmente graves e inquisitoriales y de
un totalitarismo para caerse de espaldas", agregó.
El dirigente 'popular' añadió tener ya un certificado de los servicios técnicos
del Senado que acredita que es falso que una de sus colaboradoras haya remitido,
"de forma masiva"el video. "Lo que ellos tienen es un correo de mi
colaboradora a una amiga, y tendrán que explicar cómo lo tienen", espetó.
"Estoy preocupado por si Izquierda Unida está entrando en mis ordenadores, y
le pregunto a IU cuántos ordenadores más de mi Grupo Parlamentario ha abierto o
cuántos mensajes privados tiene de mi Grupo --afirmó González Pons--, y si los
mensajes privados que yo haya podido enviar a mujer o mis amigos con opiniones
que puedan resultarles molesta los va a publicar o van a pedir que se
investiguen".
Ya conocía el vídeo
El senador explico que ya conocía ese video desde hace varios días, "porque
circulaba por internet". De hecho, el pasado martes, un día antes de que el
polémico montaje propagandístico fuera enviado desde el Congreso de los
Diputados a diputados del PSOE e IU, González Pons ya habló en el Pleno de la
Cámara Alta de una película que circulaba por la web "incómoda y
estremecedora" y, ante las protestas del Grupo Socialista recogidas en el
diario de Sesiones, leyó buena parte de sus contenidos.
Curiosamente, nadie más, hasta el día de su difusión masiva se había referido a
su existencia. Y en los lugares más comunes donde se suelen depositar estos
ficheros no era ni conocido. Es más, si se usa Google, es dificil encontrar
rastros de su existencia, hasta que ayer viernes fue colgado en la web de
noticiasdot.com o el diario Elmundo.es.
No obstante, sentenció que "ni el Partido Popular ni el Grupo Popular en el
Senado han elaborado ese video, ni han colgado de ninguna web ese video, ni han
puesto enlace a ninguna página donde dicho video estuviese colgado". "Ni
el PP ni el Grupo Popular han hecho un envío masivo de dicho video a ningún
lugar", señaló.
A este respecto, consideró "ridículo" y "lamentable" la petición de IU de que se
investigue la autoría de ese video: "En internet circulan miles de videos con
distintos contenidos racistas, pornográficos, sexistas... e IU no pide que se
investigue la autoría de esos videos, sólo lo demandan para un video que les
resulta un poco molesto --agregó--. Cuando hay videos en internet que atacan al
PP o me atacan a mí yo no pido que se investigue a quien los elabora, acepto que
hay otras opiniones y que tienen todo el derecho del mundo a expresarse. Es más,
yo he visto el video y no me parece tan grave", concretó.
Por último, abogó por que las televisiones difundan ese vídeo, en que se
defiende el ataque de Estados Unidos a Irak y se pide respeto para quienes
apoyan la invasión, y descalifica al líder socialista, José Luis Rodríguez
Zapatero y a los actores que se han caracterizado por su postura contraria a la
guerra. "Deberían darlo para que todo el mundo lo viera y juzgase, y aunque
yo no lo comparta al cien por cien, puede haber gente que tenga esa opinión y
tiene derecho a manifestarla", concluyó.
Desde el Congreso no saben quien lo envió
Por su parte, una nota oficial del Congreso de los Diputados informa que
ha identificado el ordenador desde el que se enviaron los correos. Se trata de
uno de los ocho terminales de uso común que habitualmente utilizan los
periodistas acreditados en el Congreso, "aunque, por su ubicación, han podido
ser usados también por otras personas", ya que no se necesita una clave para
acceder a ellos.
Aunque continúa investigándose, de momento, no ha sido posible comprobar cómo se
recibió ese fichero --aunque se sospecha que pudo haber sido a través de un
buzón de correo tipo 'web mail' (una cuenta no vinculada a un servidor
físico)--, ni quién lo reenvió como fichero adjunto a varios diputados.