La empresa española de productos de almacenamiento óptico "CD World" ha creado un CD grabable inservible para la reproducción de música o películas en aparatos domésticos.

El nuevo producto aporta "una herramienta a la lucha contra la piratería", que en España ya alcanza el 50% del negocio del sector, señaló hoy el director general del grupo, Kim Sorensen.

Este nuevo formato, denominado CD Data Only (CD-DO), "podría estar de forma masiva en el mercado dentro de dos o tres meses", aseguró el responsable de la compañía.
El CD es válido para grabar y recuperar datos en el ordenador, pero no funciona en las duplicadoras utilizadas por las mafias para obtener copias en grandes cantidades.

Sin embargo, con el CD-DO, el registro y la lectura de archivos informáticos convencionales se realizan sin problemas en cualquier ordenador. Según los estudios del sector, se calcula que el 50% de los 250 millones de CD que se venden cada año van destinados a la grabación de datos y aplicaciones informáticas que, por su gran tamaño, no pueden guardarse en diskettes.

El nuevo formato puede convertirse rápidamente en el “CD de las empresas”, debido a la gran demanda que existe de discos de almacenamiento óptico para actividades estrictamente profesionales como, por ejemplo, copias de seguridad, catálogos de productos, presentaciones para congresos y seminarios o bases de datos.

Una patente de método

Lo que CD World ha conseguido con el CD-DO es la industrialización de un proceso relativamente simple. Si a un CD-R normal se le graba un determinado archivo en la primera pista, por pequeño e irrelevante que éste sea, el disco ya no puede leerse en ningún equipo de música o DVD., incluidos los populares discman, y tampoco puede utilizarse en las duplicadoras.

CD World ha patentado un método propio para aplicar a grandes cantidades de CD un archivo en la pista inicial. Añadiendo a su vez una advertencia que indica que el disco no permite reproducir contenidos audiovisuales en aparatos domésticos. De esta manera, los CD convencionales se convierten en CD-DO.

La gran ventaja del proceso radica en que resulta completamente irreversible. El CD-DO es inmune a cualquier intento de desactivación o de “crackeo” de su sistema de protección; el archivo de la primera pista sólo puede eliminarse destruyendo el disco físicamente.