La misma resolución del INC también declara de interés
cultural la rica y voluminosa obra de Daniel Alomía Robles (1871-1942), nacido
en el departamento de Huánuco (nororiente) y quien produjo casi 900 creaciones
folclóricas.
Armando Robles Godoy, su hijo y reputado cineasta, recordó que ’El Cóndor
Pasa’ fue realmente el nombre de una zarzuela dramática que su padre compuso
en 1913, en cuya parte final del primer acto incluía la tonada musical que luego
se inmortalizó como canción incaica.
’’Realmente mi padre -dijo Armando Robles- nunca tocó ni hizo que se entonara
El Cóndor Pasa así como lo conocemos’’. Esta canción, agregó, tiene no menos
de 4.500 versiones en todo el mundo y en diversos idiomas.
La pieza fue interpretada por diversos grupos y cantantes, entre ellos el
folklorista argentino Falup en los años sesenta. Fue en 1970, cuando la pieza ya
era ’’reconocida nacional e internacionalmente’’, según reseña la
resolución del INC, cuando Paul Simon le puso letra y fue grabada como
obra suya por el dúo Simon & Garfunkel.
Incluso hay grabaciones de la época en las que ’El Cóndor Pasa’, que por su
nombre evoca el vuelo de la emblemática ave de los Andes peruanos, figura como
creación de Simon sin siquiera mencionarse a Daniel Alomía Robles. ’’Al año
siguiente, la familia entabló una acción judicial y las cosas se pusieron en su
lugar: Alomía Robles autor de la música y Simon de la letra’’, dijo Robles
Godoy.
’El Cóndor Pasa’ fue un tema que reflejó un conflicto entre mineros y
empresarios en los Andes Centrales, que se convirtió ’’en himno de la
libertad, pues los obreros ganaron sus reclamos’’, dijo a la AFP el
compositor andino Raúl García Zarate.
’’No es una pieza difícil pues el ritmo de ’pasacalle’ de su primera versión
es lenta y variada para identificarla con facilidad’’, indicó García Zárate,
quien hizo una adaptación para guitarra.
La difusión de ’El Cóndor Pasa’ ’’es tema de evocación, inspiración y añoranza
sobre la majestuosidad del Imperio de los Incas’’, considera la resolución del
INC. Pero además se declara que toda la obra de Alomía Robles ’’contiene
conceptos originales de música y está dedicada a fortalecer nuestra identidad
cultural’’.
La obra de Alomía Robles ’’ha escudriñado la tradición musical incaica y los
aires musicales que permitieron el desarrollo del folclore nacional’’,
agrega el documento suscrito por Luis Guillermo Lumbreras, director del INC.
Robles Godoy recopiló en varios tomos la producción de su padre, que consta de
696 piezas folklóricas, 140 composiciones (zarzuela, ópera, creaciones musicales
varias) y entre 60 a 70 poemas quechuas (idioma de los incas) traducidas al
español. |