Agencias - Un grupo de ex ejecutivos de American Express anunció
ayer que el innovador sistema de pago está dirigido a clientes de todo el mundo,
particularmente Europa, Asia y Latinoamérica, que por razón de confidencialidad
o por temor a posibles fraudes no confían en facilitar información financiera a
terceros.
La actual modalidad con tarjetas de créditos exige facilitar una
serie de datos que muchos clientes temen de lugar a fraudes o al riesgo de robo
de identidad financiera, a pesar de las medidas de control establecidas por las
empresas de crédito.
Se calcula que las compras de artículos de consumo a través de
internet equivalen a 6,8 billones de dólares anuales.
De esta cantidad el 50 por ciento se genera en Estados Unidos y
el resto se lo reparten entre Europa y Asia.
Las transacciones de comercio electrónico en Latinoamérica son
de alrededor de 100 millones de dólares al año, una cifra todavía modesta.
El nuevo sistema atraerá nuevos compradores electrónicos para
incrementarse notablemente la cifra de negocio, con un nuevo instrumento de pago
más allá de la tarjeta de crédito, explicó Manuel Montero, ex directivo de
American Express en Europa, Estados Unidos y Latinoamérica.
Aunque más de 100 millones de personas disponen de tarjetas de
crédito, en la práctica no se usan para hacer compras por internet porque muchas
empresas de comercio electrónico, particularmente en EEUU, no aprueban
transacciones de tarjetas emitidas en terceros países.
Montero, uno de los directivos que ha diseñado la nueva
modalidad, señaló que "el rechazo a este tipo de operación es lo que puso en
marcha el diseño del nuevo sistema de pago".
"Uno de nuestros ejecutivos descubrió esta peculiaridad al hacer
una compra y más tarde descubrimos que había muchos clientes internacionales que
simplemente necesitan de alguna institución que les inspirase confianza", añadió
Montero.
El nuevo sistema de pago, comercializado con el nombre de "Saf-T-Pay
(www.saftpay.com)", parte del principio de que el usuario tiene plena confianza
en su banco y que si tiene la posibilidad de pagar utilizando su institución
financiera hará más compras electrónicas que de otra forma ni tan siquiera
pensaría hacer.
Las empresas de comercio electrónicos, tanto en Estados Unidos
como en el resto del mundo, estiman que el nuevo sistema constituirá una nueva
fuente de crecimiento del comercio electrónico, ya que estos clientes no
participan en el mercado actualmente.
Los bancos ofrecen directamente el nuevo sistema a sus clientes
sin necesidad de un nuevo instrumento o clave. Una vez el cliente elige una
compra, "Saf-T-Pay" le facilita al cliente la cantidad en moneda local y el
cliente paga electrónicamente por medio de su banco.
Se calcula que las compras con esta nueva modalidad alcanzarán
los 500.000 millones de dólares en cinco años |