Angel Cortés - Volvemos de nuevo al caso del "Jamón y el Vino". Los
responsables de este servidor de páginas Web, han anunciado que pedirán la
semana entrante la "nulidad de las actuaciones efectuadas", en particular
aquellas referentes al "peritaje informático" efectuado sobre las máquinas que
fueron intervenidas por la acción policial.
Según consta en las diligencias, las maquinas fueron depositadas en un lugar
publico (en concreto en la sede de la Asociación de Técnicos de Informática de
Barcelona) y posteriormente en el despacho profesional de este perito. Un hecho
destacable es la inexistencia de cualquier registro del contenido de los
ordenadores a la hora de ser intervenidos y entregados para su peritaje. Según
han informado fuentes de la defensa del caso, en el transcurso del peritaje
oficial fueron realizadas las siguientes preguntas realizadas por su propio
perito, Carles Flamarique, al perito judicial:
- ¿Se podrían haber introducido o borrado datos de estas maquinas?
- Si, contesta la parte pericial del juzgado.
- ¿En caso de haberse introducido algo, se podría modificar la fecha de
introducción?
- Si, contesta la parte pericial del juzgado.
- ¿Quedaría algún rastro?
- El perito judicial reconoce que no.
Otro motivo de desconfianza sobre la imparcialidad del peritaje fue la "bomba"
lanzada por el abogado de la BSA en el transcurso del careo retransmitido por el
programa radiofónico Conexiones. En su intervención, Javier Ribas afirmaba que
"Dentro de las herramientas (se refiere a los ordenadores intervenidos) se
habían visto programas que presuntamente podían no tener licencia en ese momento
porque no se exhibió ninguna licencia y al mismo tiempo, además de encontrarse
muchos cracks, de algunos cracks se encontró el código fuente". Lo cierto es que
si bien luego se demostró que ciertamente en las maquinas existía "algún código
fuente de cracks", este abogado no tenia ningún motivo para suponerlo ya que el
peritaje oficial se realizo dos días después de ser grabada la entrevista....¿?.
Como ya anecdótico, (como todo lo que esta sucediendo en este caso en que lo
único serio es la posibilidad de que tres personas vayan a parar a la cárcel si
considera el tribunal que son culpables) es la actuación del perito que
"comprimió" los ficheros para su transporte utilizando un programa "shareware"
que limita su uso exclusivamente a la evaluación de sus posibilidades y que"
impide su uso sin registrar para usos comerciales, gubernamentales e
institucionales".
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