Ir al gimnasio se ha convertido en una práctica habitual para los españoles y, por ende, para sus homónimos europeos. De hecho, según una encuesta encargada por Philips entre los socios de los gimnasios Fitness First de toda Europa, coincidiendo con el lanzamiento de Bodygroom, más de la mitad (53%) van al gimnasio regularmente; es decir, 3 ó 4 veces a la semana. No obstante, a muchos de estos usuarios, cuando llega la hora de ponerse en marcha, les asaltan pensamientos tales como: pereza, aburrimiento, sufrimiento, rutina… pero, hoy en día, algunos cuentan con un argumento más para incentivar su fuerza de voluntad: en el gimnasio también se puede ligar.


Los gimnasios: un buen sitio para ligar

La encuesta de Philips ha puesto de relieve lo que ya muchos intuían, el gimnasio es uno de los lugares donde más posibilidades hay de conocer a una pareja potencial. De hecho, el 46% de los encuestados consideran los gimnasios como el segundo lugar donde mejor se liga, tras los pubs/discotecas, que obtuvieron el 53% de los votos. Además, un 28% de los asiduos al gimnasio acude por razones sociales (conocer gente, charlar, hacer amigos…) siendo los solteros el colectivo que más tiempo dedica a estas actividades deportivas; de hecho, el 27% de ellos acude diariamente.

A juzgar por estos resultados, es bastante probable que la persona que acuda regularmente al gimnasio, no sólo consiga un buen tono muscular sino que también, puede encontrar el amor. Es más, según la citada encuesta, 4 de cada 10 mujeres españolas que visitan el gimnasio se han sentido atraídas, en alguna ocasión, por algún compañero/a de fatiga; en el caso de los hombres, el porcentaje se eleva al 71%. Y la cosa no se queda ahí, según el estudio, a 1 de cada 5 hombres europeos les han invitado a salir en un gimnasio y han aceptado la cita.


Escaparate de cuerpos contorneados

Por otra parte, todo el mundo sabe que los gimnasios también son, para algunos, un buen lugar tanto para exhibirse como para “alegrarse la vista” con los cuerpos que allí se dan cita. Muchos usuarios muestran orgullosos su aspecto y se esfuerzan por ponerse en forma y mejorar su tono muscular para el deleite de sus compañeros/as de actividad. Y, no nos engañemos, la atracción física aún juega un papel muy importante en las relaciones.

En el gimnasio abundan los cuerpos contorneados, medio desnudos o con ropas ajustadas, sudorosos o untados de aceite y, por supuesto, cada vez más, depilados. Lógicamente, tanto esfuerzo por conseguir un buen tono muscular no serviría de nada si todo el fruto de su trabajo en el gimnasio se ocultara tras una gran mata de pelo.

El vello, el gran enemigo de los deportistas

Los europeos de cualquier edad se están aficionando, cada vez más, a eliminar el vello de su cuerpo, no sólo porque se encuentran más cómodos a la hora de entrenar, sino también porque, en el gimnasio, pueden atraer a parte de ese 65% de mujeres que, según la encuesta, encuentran muy poco sexy a los hombres con exceso de vello. De hecho, según la encuesta, un 15% de los hombres europeos no pondría un pie en el gimnasio sin haberse afeitado previamente el cuerpo; en Alemania este porcentaje se incrementa hasta alcanzar el 31%.