La Comisión aceptó las denuncias presentadas por el fabricante de programas informáticos noruego Opera y la asociación de productores informáticos ECIS.
Parece el cuento de nunca acabar. La Comisión de la Competencia ha vuelto a abrir un expediente de investigación en contra de Microsoft por la inclusión del navegador Explorer en el sistema operativo Windows.
En esta ocasión la denuncia ha venido de la noruega Opera quien se considera perjudicada por esta actuación. Según Opera, la inclusión del navegador en el sistema operativo deja poco margen de maniobra a las empresas competidoras.
La denuncia de Opera que tiene todos los visos de prosperar viendo la actuación de la Comisión en los últimos años “olvida” que el navegador de Microsoft ha venido perdiendo cuota en los últimos años con la irrupción de Firefox y que hoy este navegador de código abierto está instalado en millones de ordenadores de todo el mundo a pesar de no venir preinstalado ni en los PCs ni el SO.
La segunda investigación viene provocada por una denuncia de la asociación de productores informáticos ECIS.
Estos reclaman que la UE obligue a Microsoft a liberar información para hacer compatibles sus productos con Office y otras herramientas líderes en el mercado.
En un comunicado emitido, la multinacional asegura su predisposición a colaborar con la UE en su investigación.
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