Según el refranero popular, quién golpea primero golpea dos veces. Esto deberían pensar tanto Samsung como Sony Ericsson adelantando sus ruedas de prensa un día antes a la inauguración del Mobile World Congress 2010.
Oriol Cortés - En la antesala al salón, Samsung se adelantó a todos sus rivales presentando Bada, su nuevo SO (que admitirá Flash de forma nativa, tanto en páginas web como en aplicaciones) y su nuevo terminal estrella, Wave, que además del citado Bada, incorpora una pantalla Super Amoled con una calidad incomparable a ningún otro terminal. La expectación ha sido tan grande, que algunos sectores de la prensa especializada ya se considera al Wave como el móvil del MWC (y eso que como hemos comentado, el salón abre hoy).
Por su parte, Sony Ericsson siguió la misma estrategia, con distinto guión. Se aprovechó de ser los primeros en presentar, junto a Samsung, para que sus terminales estuvieran en las primeras páginas de todas las publicaciones, algo que nunca hubiera sucedido sí su presentación se hubiese hecho dentro del MWC. No, no estoy siendo muy duro. Sony Ericsson ha presentado (aunque algunos de los nuevos terminales ya son conocidos desde hace semanas) buenos terminales, pero que no destacan por ser revolucionarios. Son buenos terminales ‘ a secas’ (aunque eso ya es mucho). Los terminales que tuvimos en nuestra mano funcionaron realmente bien, de forma rápida y eficiente. Además, cabe destacar, que el hecho de que sus principales móviles ya sean conocidos por todos provocó que su presentación fuera un poco descafeinada.
Hoy es el primer día de salón, empieza lo fuerte. A primera hora, Telefónica promete presentar un servicio único en el mundo. A media mañana Nokia con Intel presentarán sus nuevos dispositivos. Y a primera hora de la tarde, Steve Ballmer dará a conocer el próximo Windows Mobile 7.0.
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