Para nadie es un secreto que la llegada de Nokia Móviles a Microsoft supondrá una serie de cambios en la antigua compañía finlandesa, pero según declaraciones del que fuera CEO de Nokia y ahora CEO de Microsoft Mobile estos no afectaran al compromiso hacía la gama baja de dispositivos móviles.
Es más, Elop aseguró que se seguirá impulsando esta línea que concentra el 50$ de las ventas de terminales de la compañía.
Lo anterior significa que la familia Asha y los recién lanzados Nokia X no quedarán fuera del catálogo, por el contrario, "con el apoyo de Microsoft, la pasión y el compromiso de llevar las tecnologías más revolucionarias a todo tipo persona, serán más grandes".
El que fuera director general de Nokia publicó una carta explicando que el espíritu de innovación y ofrecer algo diferente, así como satisfacer las exigencias de los fans, permanecen como máximas de la empresa.
Seguramente uno de los objetivos de Microsoft será como trasladar la experiencia de Windows Phone a la familia Asha. Hace tiempo que se viene hablando del desarrollo de una versión "light" de Windows Phone que pueda operar en dispositivos de bajo coste. Otra solución sería evolucionar la interfaz de Asha a la de Windows Phone (algo parecido a lo que se ha hecho con los Nokia X) a fin de acercar la experiencia a los usuarios de este tipo de terminales.
En cuanto a los Nokia X, la sensación que se respira es de satisfacción en los resultados conseguidos a pesar de las suspicacias que leventó el proyecto. En definitiva Microsoft no solo aspira a aumentar su cuota en el mercado móvil sino también a que sus servicios online compitan con los de Google para atraer nuevos usuarios a la compañía y eso lo ha redondeado "X" al unir dos mundos hasta ahora enfrentados.