La capitalidad permanente del MWC se convertirá en impulso de las nuevas tecnologías

Barcelona ha exhibido este miércoles su elección como capital mundial de la telefonía móvil conjurándose para transformar esta oportunidad en una apuesta definitiva de la capital catalana por las nuevas tecnologías de la comunicación como motor económico.

   Cinco días después de ser escogida sede del Mobile World Congress (MWC) hasta 2018, Barcelona ha presentado al público su proyecto, abogando por no contentarse con acoger el evento y trabajar para que su presencia estable en Catalunya repercuta también, además de en el sector servicios, en la industria tecnológica de la ciudad.

   El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha subrayado la "inyección de moral" que supone para Catalunya la designación de Barcelona como sede permanente del MWC, pero ha advertido que es necesario no bajar los brazos y trabajar para que sea un éxito.

   "Cuando hacemos las cosas bien y juntos, los éxitos vienen", ha señalado durante su intervención en la presentación del acuerdo, donde ha ensalzado el trabajo conjunto de todos los agentes políticos y sociales para lograr ser la sede del MWC y la capacidad para aparcar debates partidistas y cortoplacistas.

   El secretario de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información, Juan Junquera, ha celebrado la designación de Barcelona como capital de la telefonía móvil por la repercusión que tendrá en el turismo y en el sector de las nuevas tecnologías, un ámbito que el Gobierno quiere convertir en el segundo motor de la economía española.

   El alcalde de Barcelona, Xavier Trias, se ha congratulado por que se consolide el liderazgo de la ciudad como referente en las nuevas tecnologías, y se siga en la línea de convertir la capital catalana en el polo industrial en nuevas tecnologías del sur de Europa y del Mediterráneo.

   Todos han destacado la unidad de las instituciones en torno al proyecto del MWC, lo que ha permitido que la candidatura de Barcelona no se haya resentido, pese al cambio de color de los gobiernos de la Generalitat y del Ayuntamiento.

   Precisamente, la colaboración entre el sector público y privado han sido uno de los factores que han decantado la balanza en favor de la elección de Barcelona.

VALOR TECNOLÓGICO

   El director del GSMA, John Hoffman, ha felicitado a Barcelona por haberse impuesto a París, Múnich y Milán, y ha asegurado que la capitalidad del MWC creará innovación y valor, además de repercutir en el sector servicios.

   El director de la Fira de Barcelona, Agustí Cordón, ha explicado que el objetivo es transformar Barcelona en un 'hub' tecnológico y empresarial, y que la innovación tecnológica en comunicaciones arraigue en las empresas catalanas.

   También los presidentes de Turismo de Barcelona y de la Cámara de Comercio, Joan Gaspart y Miquel Valls, han animado a sacar provecho de la ocasión que supone para desarrollar la economía del conocimiento y del sector tecnológico el hecho de que la ciudad organizase del evento hasta 2018.

   El presidente de la Fira de Barcelona, Josep Lluís Bonet, se ha congratulado de que Barcelona se convierta en sede permanente del MWC, y se ha comprometido a trabajar "con todo el entusiasmo" para que la elección de Barcelona repercuta en todos los sectores.