La PS4 se perfila como ganadora en la guerra de consolas nextgen frente a Xbox One y la Wii U

El analista Michael Pachter ha hecho previsiones de ventas de las consolas PlayStation 4 (PS4), Xbox One y Wii U de aquí a tres o cuatro años. Conforme a las expectativas del analista, PS4 alcanzará los 37,7 millones de unidades vendidas en todo el mundo para el final de 2016, mientras que la consola de la empresa de Bill Gates alcanzará los 29 millones.

Sin embargo, los pronósticos para la consola de Nintendo, Wii U, no son tan alentadores, según informa la webComputersandvideogames.com. Patcher cree que se habrán vendido tan sólo 20 millones de unidades para finales del año 2016. Esta cifra contrasta con la de las consolas next-gen de Sony y Microsoft porque Wii U se lanzó aproximadamente un año antes.

Si la previsiones de Pachter se cumplen, para finales de 2017, la PS4 habrá alcanzado los 49 millones de unidades vendidas, dejando atrás a la Xbox One, que habría llegado a los 38 millones.

Con los vaticinios de Pachter se van confirmando las predicciones que lanzaron desde la firma de analistas IHS en noviembre de 2013. Unos días antes del lanzamiento de la PS4, como publicaba el portal VG247.com, el analista del sector de los videojuegos Piers Harding-Rolls declaró: "En IHS, creemos que lamayor lealtad geográfica hacia la marca Sony -especialmente en la Europa continental y Japón- será decisivo para que la PS4 deje atrás a Xbox One en cuanto al número de ventas en una escala global".

Otra de las claves para que los consumidores se decanten por la PS4 sobre la Xbox One son los lanzamientos exclusivos de videojuegos, aunque IHS creyó "más formidable" la oferta de Xbox One durante el período de lanzamiento. También el precio y la polémica inicial con respecto a las licencias de los juegos en la consola de Microsoft serían factores que jugarían en contra de Xbox One.

Durante los lanzamientos de la PS4 y la Xbox One, se ha evidenciado la diferencia en las ventas. A comienzos de diciembre de 2013, en apenas unos días, la consola de Sony había vendido en EEUU 2,1 millones de unidades, la de Microft 2 millones, pero la consola de Nintendo (que fue lanzada en noviembre de 2012) no había alcanzado los cuatro millones a finales de septiembre de 2013.

IHS explica que las bajas ventas de la Wii U se deben a que antiguos usuarios de la Wii no pasaron a Wii U cuando se lanzó ya que esperaron al lanzamiento de las dos consolas de nueva generación.