La TV de pago se enfrenta a una nueva crisis
ITV, el operador de TV digital británico, se declaro el martes
en quiebra y dejara de emitir. La dura competencia en el
mercado, los altos contratos del fútbol y el poco apetito de
los consumidores a pagar por el contenido han arrastrado a
esta compañía a la quiebra y cese de sus emisiones. Una
situación semejante, aunque no idéntica a la que vivió hace
pocos días Kirch y el operador español Quiero.
Los accionistas de ITV han perdido unos 3650 millones de euros
en esta aventura digital, aunque las perdidas podrían
aumentarse en 500 millones de libras si los tribunales dan la
razón a los clubes y obligan a pagar a Granada y Carlton el
contrato multimillonario que firmaron con la liga de fútbol.
Los canales en abierto de ITV seguirán sus emisiones, dijeron
ayer fuentes del operador, así como todos aquellos que se
venían recibiendo a través de esta plataforma: BBC 24, BBC
Four, BBC Choice.
El cierre supondrá el despido de unos 1500 trabajadores, la
mayoría de ellos (unos 900) del centro telefónico de Pembroke,
en Gales, y otros 400 en el centro telefónico de Plymouth, en
Devon.
sábado mayo 24, 2014 |