La compañía británica Vodafone se ha reservado más de 2.000
millones de euros (cerca de 340.000 millones de las extintas
pesetas) para comprar a Acciona el 6,2 por ciento que aún no
tiene de la antes española Airtel.
En las cuentas de su último ejercicio (cerrado el 31 de marzo)
se refleja una provisión de 1.300 millones de libras por si
Acciona se deshace de su participación en Airtel, empresa que
nació con la intención de competir con Telefónica Móviles en
la aún casi desconocida telefonía móvil de segunda generación
(GSM) y que ahora cuenta con cerca del 25 por ciento del
mercado.
Cuando Airtel ganó en 1994 su licencia de telefonía móvil GSM
(la que ahora usan más el 70 por ciento de los españoles) en
su capital estaban Airtouch -comprada posteriormente por
Vodafone- (con un 15,78 por ciento), BT (6,31%), diversas
cajas (16,84%), BCH (13,71%), Banco Santander (13,71%),
Ineuropa (10,51%), UEF y Fecsa (7,89% cada una), Inversiones
Fersango (4,73%) y Corporación Financiera Alba (2,63%).
Después de muchos movimientos accionariales, en enero del 2000
Acciona, Torreal y Corporación Financiera Alba (que entonces
controlaban el 16,91 por ciento de su capital) acordaron
conceder una opción de compra de su participación a la
compañía británica Vodafone Airtouch, que ya poseía el 21,7
por ciento de Airtel (entonces valorada en 4 billones de
pesetas).
La primera en vender fue Corporación Financiera Alba, que
cambió su 2,73 por ciento del capital de la española por
109.000 millones de pesetas (655 millones de euros) en
acciones de la británica.
Luego fue Torreal, que el pasado mes de abril vendió su
participación del 2,2 por ciento por 650 millones de euros,
con lo que ya sólo queda Acciona por ejercer su opción de
venta a Vodafone, que termina en el 2003.
Esta operación permitiría a la constructora española
multiplicar por cuatro sus recursos propios, una oportunidad
que hizo que su presidente, José María Entrecanales, llegara a
decir la semana pasada que, tal y como está el mercado de las
telecomunicaciones, es poco probable que no ejecuten el
derecho de venta al precio garantizado.
Para Vodafone no es un problema que el presidente de su filial
en España sea de la familia Entrecanales y estaría dispuesta a
mantener a su presidente, José Manuel Entrecanales, según
explicó recientemente el consejero delegado de Europa del Sur
de Vodafone, Vittorio Colao.
Fue también Colao quien aseguró que el equipo gestor de la
compañía en España se mantendrá aunque cambie de manos la
parte que tiene Acciona y quien descartó la posibilidad de que
se aplique un plan de regulación de empleo en este país.
En cuanto al reciente nombramiento como director de
Operaciones en España de Francisco Román, el directivo apuntó
que tiene una trayectoria profesional "única" para los
intereses de Vodafone y que se mantendrá junto al resto del
equipo directivo.
Con estas operaciones, Vodafone ha pasado de entrar en Airtel
(a través de Airtouch) en 1999, a hacerse efectivamente dueña
de la española en diciembre del 2001 (cuando aumentó su
participación del 21,3 al 73 por ciento) y antes de que
termine el año podría llegar a controlar el cien por cien.
Esta semana la compañía ha presentado sus resultados durante
el último ejercicio fiscal, que, aunque en conjunto reflejan
unas pérdidas de 21.490 millones de euros (un 67 por ciento
más), la dirección está satisfecha por que el beneficio
operativo aumentó un 35 por ciento hasta los 11.200 millones
de euros, una cifra mayor que la esperada.
Aunque Vodafone -que negocia deshacerse de su participación
indirecta en Xfera- no ha facilitado los datos completos de
España, sí se sabe que el resultado bruto de explotación (EBITDA)
aumentó un 43 por ciento hasta los 1.160 millones de euros y
que su número de clientes de contrato creció un 14,7 por
ciento.
sábado mayo 24, 2014 |