Un estudio señala que la relación entre las imágenes de los
aviones impactando contra las Torres Gemelas y el efecto que
producen es más notable en las personas afectadas directamente
por los ataques. Sin embargo, advirtió que también afecta, y
mucho, a los niños, que no diferencian si lo que están viendo
ya pasó o está pasando.
Un estudio publicado por la
Asociación Médica de los Estados Unidos y confeccionado a
partir de una encuesta realizada por Internet, asegura que “la
cobertura televisiva de los atentados puede dañar seriamente
la salud”. La advertencia surge del estudio de la relación
que existe entre la exposición repetida a las imágenes de los
ataques y el “síndrome de estrés postraumático” (PTSD,
según sus siglas en inglés). La encuesta, de la que
participaron 2.273 estadounidenses, indicó que hay una
estrecha correlación entre la cantidad de tiempo que alguien
vio la cobertura televisiva de los ataques y la depresión que
puede ocasionar la repetición de aquellas imágenes. Los
médicos concluyeron que, por eso, “es imperioso tener
cuidado al exponerse a la cobertura que recordará el primer
aniversario de los atentados”.
“Encontramos una relación estadísticamente significativa
entre los niveles de PTSD y el número de horas de televisión
vistas durante y después de los ataques contra Nueva York y
Washington, lo que podría querer decir que la TV contribuyó al
desarrollo de los síntomas”, dijo el doctor William
Schlenger, uno de los autores del estudio. La cobertura
televisiva de los ataques incluyó muchísimas imágenes
perturbadoras, entre ellas, las de los aviones secuestrados
estrellándose contra el World Trade Center (WTC), las tomas
que muestran gente saltando de los edificios y el colapso
final de las dos torres. Todas estas imágenes fueron repetidas
una y otra vez durante días, semanas y hasta meses, y
seguramente regresarán hoy a las pantallas.
Otro estudio, realizado por la
Academia de Medicina de Nueva York, contiene pruebas que
corroboran algunos de los hallazgos del doctor Schlenger. “La
prueba sugiere que la exposición a la cobertura de los ataques
del 11 de septiembre puede ser suficiente para que algunas
personas desarrollen problemas de salud mental”, dijo el
doctor Sandro Galea, quien hizo públicos los resultados del
estudio. La correlación entre las imágenes y la profundidad de
sus efectos fue particularmente importante en las personas
afectadas de manera directa por los ataques, como los amigos y
familiares de las víctimas. Galea también sugirió tener
precaución a la hora de prender la tele: “Aunque aún
debemos trabajar más los resultados, es evidente que la gente
directamente afectada debe evitar volver a ver estas imágenes”,
advirtió.
Tanto Schlenger como Galea dijeron que los niños son quienes
corren mayores riesgos de resultar afectados porque les cuesta
más diferenciar las imágenes pasadas de los hechos actuales.
Alertado, el servicio de orientación de la
Oficina Estatal de Salud Mental de Nueva York elaboró una
guía para ver la televisión durante el aniversario .
“Algunas coberturas ofrecerán escenas y sonidos muy intensos
del desastre. La exposición repetida a ellas puede generar
síntomas ya experimentados, como problemas para dormir,
malestar generalizado y falta de concentración”, advierte
la guía, que también sugiere ver la TV acompañado.
Acusada de antemano, la industria de la televisión ha
prometido ser cuidadosa. Incluso, la cadena estadounidense
NBC contrató a un psiquiatra
de niños para que aconseje a sus productores sobre el manejo
del tema. Marcy McGinnis, de la
CBS News, dijo que “hay consenso” respecto a evitar
el uso de estas imágenes para impactar en la audiencia. “No
vamos a pasar mil veces la cinta de los aviones chocando
contra los edificios para que nos vea más gente”, afirmó
McGinnis. Para muchos neoyorquinos, sin embargo, la
programación televisiva no será un problema: “No he
decidido exactamente que voy a hacer, pero lo único que sé es
que la televisión permanecerá todo el día apagada", dijo
la vecina de Manhattan Ethel Lebenkoff. Agencias-Clarin
sábado mayo 24, 2014 |