La red de academias Oxford English School confirmó su situación de quiebra voluntaria al presentar ayer por la mañana el correspondiente expediente en el Juzgado Decano de Barcelona, que será remitido mañana al Juzgado de Primera Instancia número 30 de esta ciudad.

La quiebra supone el cierre definitivo de los 18 centros que la empresa tiene en toda España, que esta tarde, como había anunciado la compañía, no han impartido clases. En total, 4.500 alumnos quedan sin cursos y 140 empleados sin trabajo.

La Generalitat de Catalunya certificó ayer por la tarde la no prestación de servicios en las academias de Oxford English School en la provincia de Barcelona. Esta red de academias de inglés tenía 4 centros en Barcelona, uno en Sabadell, Terrassa, Premià de Mar, Viladecans, Sant Boi de Llobregat, Castelldefels, Hospitalet de Llobregat y Badalona. En total 12, a los que se les tienen que sumar otro en Valencia y 5 en Madrid.

El director general de Consumo de la Generalitat, Josep Tous, señaló en declaraciones a Europa Press que algunos centros estaban abiertos, pero sólo para informar a profesores y alumnos de la situación de quiebra de la empresa. Los centros abrían de 17.00 a 21.00 horas (algunos días hasta las 22.00 horas), por lo que la verficación de la suspensión de las clases no se ha realizado hasta media tarde. La Generalitat ha abierto expediente informativo, que puede convertirse en sancionador, según declaró Tous.

Las tres Comunidades Autónomas afectados por el cierre de las academias de inglés Oxford English --Cataluña, Madrid y Valencia-- han iniciado diligencias previas a un previsible expediente sancionador a estos 18 centros, según comunicaron estas administraciones al Instituto Nacional de Consumo (INC). Oxford se adhirió la semana pasada a la Junta Arbitral de Consumo de Cataluña
en previsión a un posible cierre y para minimizar los perjuicios a los alumnos.

Tous señaló que los afectados por Oxford English School, unos 3.500 en Catalunya, podrán dejar de pagar los cursos, financiados a través de crédito bancario, dentro de dos meses, cuando desde Consumo se hayan podido tramitar todos los expedientes. Tous volvió a apelar a la "cultura de la reclamación" a la empresa, bancos e Instituto Catalán de Consumo para que la Junta Arbitral de Consumo de Cataluña pueda emitir los laudos pertinentes.