Gabriela Casavantes (EFE) - Lo clásico renovado está en auge, evita las
estridencias y prueba una imagen retro. Basta con recobrar el glamour y la
elegancia sencilla, teñida de minimalismo, al estilo Gwyneth Paltrow. Siempre
recuerda: menos es más. Esta temporada otoño-invierno pon tus ojos en prendas
que marquen tu silueta: faldas de tubo, chaquetas entalladas, cinturas marcadas,
vestidos etéreos, pantalones rectos, blusas con cintas hiperfemeninas, suéteres
de punto y capas cortas para combatir los días más fríos.
Recupera las prendas buenas, piezas antiguas, con clase, y combínalas con otras
más actuales. No se trata de que te vistas con ropa de segunda mano, sino de que
crees tu estilo propio. No dudes en recuperar el nuevo vintage si en algún
clóset encuentras blusas con cintas, trajes sastres masculinos, capas de
terciopelo, vestidos con encaje o blusas con adornos o encajes.
Envuelve tu silueta femenina de morado, lila, lavanda, vino, verde, rojo,
naranja, beige, amarillo, rosa y azul celeste. El gris plata y el siempre
elegante negro te hacen lucir poderosamente sexy y colmada de feminidad.
Los diseñadores pretenden vestirte como una mujer elegante, con un aspecto
impecable, lejos de la imagen cursi y recatada. Los tejidos protagonistas son la
lana, el encaje, la muselina de seda, el satín, el tartán, los cuadros escoceses
y los estampados felinos, sobre todo el de leopardo.
PRENDAS IMPRESCINDIBLES
Puedes renovar tu clóset sin dañar tu presupuesto, actualizando tu guardarropa
añadiéndole a cuatro o seis de tus prendas básicas las últimas tendencias
básicas:
Falda de tubo: Le da frescura look urbano. Se lleva por debajo de la
rodilla. Combínala con blusas con lazos metidas por dentro y conjuntos de blusa
con suéter.
Pantalón de corte masculino: Es prenda que le queda bien a casi todas la
mujeres. Se lucen con blusas y chaquetas muy entalladas. Para lograr un look más
femenino, úsalos con tacones. El detalle final y protagonista: un listón de raso
en lugar de cinturón. Evita caer en el error de vestirte demasiado masculina, no
se ve bien.
Blusa con lazo: Es imprescindible, es otra estrella de la temporada
porque favorece mucho y acentúa tu feminidad. Llévala con jeans, faldas y
pantalones. Elígela en muselina, raso, encaje o satín, no te arrepentirás.
Conjunto de blusa con suéter: Imposible estar a la última sin uno.
Combínalo con pantalón recto o falda por debajo de la rodilla. Llamarás más la
atención si te colocas un broche cerca del hombro o un pañuelo al cuello.
DE NOCHE, VISTE DE LARGO
Vestidos largos: Para vestirte en grandes celebraciones de noche, los
diseñadores han recuperado los vestidos largos de ensueño. Los tejidos adecuados
para los vestidos largos son el satín, el crepé de seda, la muselina de seda, el
raso y el terciopelo. La mayoría llevan grandes escotes en V o “palabra de
honor”, espaldas descubiertas, hombros al aire, finos tirantes, y se adornan con
lentejuelas o cristales.
Estolas: Las “boas”, pequeñas capas y espectaculares broches son el
complemento perfecto y las sandalias el calzado más adecuado.
Smoking: Es un gran aliado para conquistar la noche. Es un básico con
posibilidades infinitas: con blusa blanca, camiseta o simplemente con un buen
collar de perlas. No olvides los stilettos o las sandalias con tacón eterno.
EL TOQUE PERSONAL
Accesorios y detalles: Te darán un estilo personal. Llegan repletos de glamour.
Son brillantes, con infinidad de colores e imprescindibles. Pero úsalos con buen
gusto y elegancia, no se trata de salir a la calle adornada de pies a cabeza.
Son piezas clave con personalidad pero discretas. Lo ideal es lucir un broche
antiguo, mejor si es de piedras preciosas, pero si no está dentro de tu
presupuesto, no te apures, opta por una flor de tela o de piel que realce tu
atuendo.
Zapatos: Este año adquieren también aire retro: puntas redondeadas, tacón
grueso y sujetos al tobillo. La fiebre del estampado animal y los cuadros
escoceses deja huella en los zapatos. Para el día, lo más cómodo es llevar unas
ballerinas bajas, como las que usaba Audrey Hepburn. Por la noche, tu mejor
aliado son los tacones, siempre elegantes y femeninos. Los más solicitados son
los de cuña con pulsera al tobillo.
Cinturón: Se llevan anchos, angostos, de piel o de tela. Todos valen
siempre y cuando estrechen tu cintura.
Lazos: Lazos a la cintura, sobre la cadera o ajustadas al cuello
proporcionarán al look el aire románticos de los años 40. Lazos de raso, satín,
seda, gasa o terciopelo, es lo último para meterse en cintura.
Capa: Son versátiles, cómodas y muy prácticas. Se llevan pequeñas y con
una pizca de imaginación se combinan fácilmente y combaten los días más fríos.
Bolso: Es el complemento estrella de la mujer, tanto de día como de
noche. Imposible salir de casa sin él. Para el día, es mejor optar por uno
grande con atrevidos colores y detalles que consigan atraer muchas miradas. Son
muy apreciados los de asas de cadena. Por la noche, elige una pequeña cartera de
mano con flores bordadas o dibujos de época, seguro que guardas alguna antigua
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