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En el álbum Confessions on a dance floor (Confesiones sobre la pista de baile),
que será lanzado el próximo 15 de noviembre, está incluida la canción llamada
Isaac, sobre Yitzhak Luria, un erudito del misticismo y la cábala que vivió en
el siglo XVI.
Los rabinos que supervisan la tumba de Luria y el seminario que lleva su nombre
en la población de Safed, en el norte del país, están molestos por la canción y
creen que es un intento de la artista de sacar provecho del nombre del erudito.
Madonna realizó una gira por Israel en 2004, cuando visitó varios sitios
importantes para la cábala, pero no llegó hasta la tumba de Luria.
La cantante y actriz creció como católica, pero se convirtió en
una seguidora de la cábala en los últimos años.
De hecho Madonna ha adoptado el nombre hebreo "Ester", lleva un lazo rojo en su
muñeca para rechazar el "mal de ojo" y, según algunos informes, se ha negado a
actuar los sábados, el día de descanso judío.
No es la primera vez que la popular cantante apunta directamente contra las
religiones: lo había hecho antes contra el catolicismo, cuando editó el
videoclip del tema Like a prayer, en el que la imagen de un Cristo negro lloraba
lágrimas de sangre. Razón que fue suficiente para que se encendiera la polémica
y Madonna fuera llamada "hereje". |
