Investigadores del Departamento de Sistemas Informáticos y Computación de la
Universidad Politécnica de Valencia han desarrollado un sistema de realidad
virtual que permite el entrenamiento quirúrgico de los cirujanos sin necesidad
de cadáveres, animales, maniquíes o intervenciones reales.
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Agencias - Así lo afirmó el
investigador Carlos Monserrat, quien señaló que este tipo de sistemas virtuales
permiten a los cirujanos afrontar sus intervenciones con mayor precisión.
Este técnica propicia que se reduzca el daño infligido al paciente, se minimice
el dolor del postoperatorio, se reduzca el riesgo de infección del paciente
durante la intervención y su recuperación sea más rápida.
Esta línea de investigación conocida como "MedICLab" (Medical Image Computing
Laboratory) que dirige el profesor Monserrat ha dado como primer resultado el
desarrollo de un simulador quirúrgico genérico para el entrenamiento de
cirujanos en casi cualquier cirugía mínimamente invasiva.
El profesor Monserrat aseguró que el entrenamiento es un elemento fundamental en
cualquier tarea especializada y agregó que éste "es crítico en el terreno de la
cirugía, dado que cualquier fallo por la inexperiencia del cirujano puede ser
fatal para el paciente pudiendo ocasionarle la muerte".
"Hasta ahora, el entrenamiento de los cirujanos se ha llevado a cabo mediante
la utilización de cadáveres, maniquíes, animales vivos o en intervenciones
quirúrgicas reales bajo la supervisión de un experto", señaló.
Este tipo de entrenamientos, a juicio de Montserrat, tienen dos problemas
obvios: por un lado, la falta de realismo en las prácticas realizadas sobre
maniquíes y cadáveres, ya que el comportamiento real de los tejidos en seres
vivos es muy distinto al que presentan estos elementos de entrenamiento.
"Por otro lado, en cualquiera de los entrenamientos mencionados está limitada
la capacidad de repetir la intervención hasta su correcto aprendizaje y la
variabilidad patológica en la que los cirujanos pueden llegar a entrenarse. A
ello hay que añadir los problemas morales que conlleva la utilización de
animales vivos en experimentación", señaló el investigador.
Para Montserrat, "todo esto reduce las posibilidades del correcto aprendizaje de
las técnicas, la mejora de las técnicas aprendidas o el aprender cómo puede ser
operada una nueva patología a la cual no se había enfrentado antes el cirujano".
Carlos Monserrat subrayó que la evolución actual de la potencia de cálculo de
los ordenadores y, más concretamente, el "hardware" y el "software" gráfico
permiten la investigación para el desarrollo de entornos virtuales orientados a
la creación de simuladores.
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