Angel Cortés - En su puesta en marcha, si finalmente no
surgen inconvenientes de última hora, ambas cadenas sumaran 2,5 millones de
abonados, por lo que se espera un crecimiento lento en los dos próximos años.
Uno de las condiciones impuestas por el Gobierno (que ha sido recurrido por las
dos compañías) es la limitación en los aumentos de abonos al incremento de la
inflación anual.
Además, la nueva plataforma deberá afrontar unos costes de reestructuración
de entre 300 y 400 millones de euros. Esto significara intentar reducir al
máximo posible los gastos en este periodo para evitar incrementar la abultada
deuda que acumula. Para ello, y durante la primera fase de integración no se
cambiaran los decodificadores a los usuarios, manteniendo cada plataforma su
propio sistema. Esto supone, además, que por el momento cada plataforma seguirá
utilizando su propio satélite: Astra, CSD, e Hispasat (Vía Digital).
Los usuarios de CSD perjudicados
La decisión de Sogecable de no cambiar los decodificadores perjudica
principalmente a los clientes de CSD que disponen de un terminal con una
tecnología anticuada e inferior en prestaciones a la ofertada por Vía Digital.
Además, CSD venia prometiendo a sus usuarios la llegada de un nuevo terminal que
revolucionaría el mercado, integrando internet y multimedia, promesa que quedará
en el aire, visto los vientos que corren, tanto en España como en Francia.
45 euros por suscriptor en el 2008
La subida de tarifas, posible a partir del 2006, y la inclusión de nuevos
servicios, permitirá a la plataforma aumentar hasta 45 euros la media por
suscriptor en el 2008, según un informe publicado. |