Agencias - El Departamento de Comercio e Industria (DCI) dijo
que el correo no solicitado en Internet era un problema de rápido crecimiento en
Gran Bretaña y en el resto del mundo, y acaparaba el 40 por ciento del tráfico
de e-mail global.
"El 'spam' se ha convertido en la maldición de la Internet. Es la principal
fuente de frustración. ya que satura las bandejas de entrada de todo el mundo",
dijo Stephen Timms, ministro de Comercio Electrónico.
El DCI dijo que su proyecto obligará a que los comerciantes obtengan el
consentimiento previo antes de enviar e-mail publicitarios no autorizados.
Por otra parte, el uso de "cookies" -- archivos de texto implantados
automáticamente en los terminales de los usuarios y que registran datos sobre
los mismos -- también tendrá que ser claramente indicado para que el usuario
tenga la oportunidad de rechazarlos.
Las propuesta recoge derechos más amplios para que los internautas decidan si
desean estar incluidos en directorios de suscriptores.
"El objetivo de esta regulación es devolver el control al consumidor. Es vital
que la gente se sienta segura y confíe a la hora de utilizar estas tecnologías.
No se debe permitir que el 'spam' llegue de algún modo", dijo Timms.
Las propuestas de la DCI forman parte de una iniciativa europea para acabar con
el "spam", pero fuentes de la industria señalan que el correo no deseado, que en
gran medida proviene de Estados Unidos, es un fenómeno global que no reconoce
fronteras y será difícil prohibirlo completamente