Se trata del primer código del sector del entretenimiento que
cumple
con los diferentes estándares culturales de 16 países europeos: todos los países
de la Unión Europea (con excepción de Alemania), más Noruega y Suiza.
PEGI ha sido elaborado durante los últimos 20 meses.
Auspiciado por la Comisión Europea, el proyecto se inició en mayo de 2001, en
una asamblea plenaria en Bruselas a la que asistieron una amplia representación
de gobiernos europeos, junto con los principales editores y productores de
hardware para videojuegos. Con motivo de la Presidencia española de la Unión
Europea en el primer semestre de 2002, se produjo un importante impulso en el
desarrollo del nuevo sistema PEGI.
Su objetivo principal es que los consumidores, en particular
los padres y los educadores, cuenten con información suficiente sobre los
videojuegos que están a la venta, en España o en cualquier otro país europeo
adscrito al sistema, para poder elegir los productos más adaptados a la edad del
usuario, limitando así la exposición de los niños a contenidos que podrían
resultarles inadecuados.
Concretamente, PEGI aporta dos novedades:
- La introducción de más edades intermedias: 3+ años, 7+
años, 12+ años, 16+ años y 18+ años.
- La presencia de unos iconos descriptores de contenidos que
especifican la razón por la que se ha clasificado el videojuego en la categoría
de edad seleccionada. Los iconos utilizados son los siguientes: Violencia,
Palabrotas, Miedo, Sexo o desnudos, Drogas y Discriminación.
El proceso para establecer la calificación es sencillo. En
una primera fase, los editores tienen que cumplimentar un formulario (disponible
on-line) sobre los contenidos del videojuego y, a continuación, remitirlo al
Instituto Holandés de Clasificación de Material Audiovisual (NICAM), para que
establezca una clasificación provisional. Si esta clasificación corresponde a 3+
o 7+ años, quedará aprobada por el NICAM mediante la concesión de una licencia
para reproducir el correspondiente logotipo en el empaquetado del videojuego.
Cuando la clasificación provisional sea de 12+, 16+ o 18+ años, el NICAM
revisará el videojuego antes de conceder la licencia. La clasificación de edades
se complementa por una serie de iconos descriptores de contenido, que serán
elegidos por los propios editores y no necesitarán la aprobación del NICAM para
su impresión en el embalaje.