Agencias - "El FBI ha abierto una investigación en el caso
'Bugbear", declaró un portavoz, Bill Murray, precisando que la policía
federal tenía constancia de que al menos 200.000 sistemas informáticos habían
sido ya infectados por este nuevo virus, que muta dificultando el trabajo de las
compañías antivirus.
Además, precisó que el virus es capaz de determinar si los sistemas infectados
pertenecen a instituciones financieras y que, en este caso, instala una 'puerta
trasera' para facilitar el acceso de los piratas informáticos.
En cualquier caso, el portavoz afirmó que el FBI desconoce si hasta la fecha se
habían puesto en peligro informaciones bancarias confidenciales. No obstante,
apuntó que el código malicioso parece apuntar a un millar de bancos e
instituciones financieras estadounidenses e internacionales.