Agencias En 2008 habrá en Europa 286 millones de telefónos,
ordenadores portátiles y PDAs con tecnología inalámbrica 'Bluetooth', frente a
53 millones de dispositivos de WLAN --popularmente conocidas como 'Wi-Fi'--,
principalmente portátiles, aunque ambas tecnologías son complementarias y rara
vez compiten.
"Con todo el bombo de hoy en día sobre el despliegue de 'hotspots' públicos
WLAN, parece como si nunca se hubiera producido el 'boom' y la explosión de la
burbuja de las 'puntocom", afirmó el analista senior de Forrester Lars
Godell.
"Creemos que mucho del dinero que se está invirtiendo hoy en día en las WLAN
públicas para permitir el acceso --desde sitios tan diversos como bares,
estaciones, aeropuertos y hoteles-- está siendo derrochado", añadió.
En su opinión, "restricciones básicas en el número de dispositivos
disponibles y la voluntad de los usuarios por pagar una cantidad significante
por acceder a Internet en movimiento limitarán el número de usuarios de las WLAN
públicas a un número mucho menor del previsto por la capacidad de las redes".
UNO DE CADA DIEZ EUROPEOS
El informe señala que para que los puntos de acceso inalámbrico triunfen el
dispositivo clave es el ordenador portátil, pero sólo uno de cada diez europeos
dispone de ellos en la actualidad, y Forrester prevé que la cifra sólo aumente
hasta el dieciséis por ciento en 2008.
La consultora anticipa que sólo 7,7 millones de europeos (veinte y quince por
ciento de propietarios de PDAs y portátiles, respectivamente) serán usuarios de
los 'hotspots' públicos dentro de cinco años. Esta cifra se contrapone a los 312
millones de usuarios de telefonía móvil que la compañía prevé para 2008.
El estudio considera que el uso de las WLAN quedará reducido al ámbito
empresarial y no a puntos de acceso público. Así, en 2008 estima que el 57 por
ciento de los usuarios de portátiles con capacidad de acceso a WLAN utilizarán
exclusivamente 'hotspots' privados.
IDC: MERCADO VERDE
Por otro lado, otro reciente estudio de la consultora IDC se muestra también su
escepticismo ante el auge de este fenómeno, al afirmar que, "pese al rápido
crecimiento tanto del número de puntos de acceso 'Wi-Fi' como de usuarios en
todo el mundo, el mercado de 'hotspots' todavía está en etapas muy prematuras de
su desarrollo".
IDC considera que estas cifras iniciales representan poco más que la creación de
una infraestructura de puntos de acceso. "La construcción de una oferta de red
funcional que atraiga y retenga a los abonados a largo plazo se presenta mucho
más difícil de lo que el 'bombo' del 'Wi-Fi' hoy admite", recoge el informe.
"En muchos aspectos, el mercado de 'hotspots' se encuentra como otra fiebre del
oro tecnológica", señaló uno de los expertos de la consultora, Keith Waryas. "Lo
que estamos oyendo ahora son las promesas de fama y fortuna típicas de una fase
de desarrollo temprana", añadió.
Desde su punto de vista, resulta "obligatorio" recordar que este mercado todavía
es "extraordinariamente joven y lleno de incertidumbres. La mayoría de los
modelos de negocios todavía no se han probado, ni consolidado, y el entorno
competitivo todavía es incierto", señaló.
DOS FASES
La consultora prevé que a lo largo de los próximos cinco años el mercado de
puntos de acceso evolucione en dos fases diferenciadas: durante los primeros dos
años, expansión masiva de redes, seguido por tres años de construcción intensa
de relaciones con operadores de red, proveedores de servicios, etc.
IDC calcula que a lo largo de los próximos cinco años el número mundial de 'hotspots'
comerciales disponibles se incrementará a un ritmo anual del 57 por ciento,
mientras que el número de usuarios de estos puntos de acceso se aproximará a los
25 millones.