El presidente de la Asociación de Internautas (AI), Víctor
Domingo, achacó ayer el retraso español en materia de nuevas tecnologías a la
falta de inversiones, las carencias en formación y a que la Administración "no
cree en Internet", pero, sobre todo, a un modelo de competencia y regulación de
precios "pernicioso y perverso". En su intervención en la jornada "La Calidad en
Internet: hacia un nuevo modelo", organizada por la AI, Domingo consideró
necesario una flexibilización del sector, de forma que el único criterio
regulatorio sea la fijación al operador de referencia de un precio máximo para
comercializar el ADSL entre consumidores finales, obviando, por tanto, los
márgenes de intermediación existentes actualmente para los nuevos operadores.
En cuanto a la evaluación de los servicios de Internet, Domingo criticó que una
tecnología "con repercusión en millones de ciudadanos esté exenta de un mínimo
marco estandarizado de calidad", de forma que se puedan cuantificar las
diferencias en la velocidad de acceso, los fallos de seguridad o los plazos de
entrega.
Modelo de calidad
El modelo que propone la AI incluiría indicadores de disponibilidad de la
conexión, tanto de las realizadas a través de líneas telefónicas convencionales
como por banda ancha. En el primer caso, se tendrían en cuenta los porcentajes
de pérdidas de acceso, autenticación y navegación, así como la media de la
velocidad de descarga y los retardos introducidos por la Red.
En el caso de las conexiones por cable o mediante líneas digitales de abonado,
se cuantificaría el porcentaje de disponibilidad de la sesión, las velocidades
de envío y recepción de datos, e, igualmente, los retardos.
Asimismo, propone medir también la calidad del correo electrónico -tanto web
como POP3-, a través del porcentaje de pérdidas de conexión al servidor de
correo saliente y entrante, de "e-mails" que no llegan a su destino y
comprobando el tiempo que tarda en enviarse efectivamente un correo.
Para Domingo, el futuro de la Sociedad de la Información en España pasa también
por invertir en infraestructuras de telecomunicación, la movilidad contractual
entre proveedores de servicios de Internet (ISP) -de forma que se pueda cambiar
de servidor sin penalización, aunque haya que pagar el alta-, y el consenso en
las líneas estratégicas a seguir.
Por esta razón, reclamó que se respeten los compromisos de inversión en la
creación y mantenimiento de las infraestructuras de telecomunicaciones, que se
constituya un fondo de compensación del servicio universal, y que se creen
ayudas a iniciativas de innovación, así como que se impulse el desarrollo de la
Administración "online" y se forme a los profesores.