La revista británica "Journal of Humanistic Psychology" publica esta semana un
informe de un grupo de psicólogos, dirigidos por Richard Kinnier, de la
Universidad de Arizona (EEUU), que se han dedicado a analizar las palabras de
200 pensadores, desde el escritor Oscar Wilde al emperador Napoleón.
La conclusión mayoritaria del estudio es que "hay que disfrutar la vida
mientras se pueda".
Eso era, al menos, lo que pensaba el 17 por ciento de los analizados, entre
ellos personalidades tan dispares como el ex presidente estadounidense Thomas
Jefferson y la cantante Janis Joplin, quien murió a los 27 años de una
sobredosis de heroína, pero no sin antes cantar "disfrútalo mientras puedas".
En el extremo contrario, sin embargo, figuraron personalidades algo más
turbias, como Sigmund Freud, creador del psicoanálisis, o los escritores Frank
Kafka, Jean-Paul Sartre y Joseph Conrad, hasta un total del 11 por ciento de
los estudiados.
Para todos ellos -como bastante claro quedó en sus escritos- la vida
simplemente no tiene sentido.
Pero otro grupo de pensadores, como el filósofo francés Jean-Jacques Rousseau
o Albert Einstein, autor de la teoría de la relatividad, opinaban que la vida
es para "amar, ayudar y prestar servicios a los demás".
Esta fue la segunda opción en cuanto al número de respuestas recolectadas y la
escogida también por el líder pacifista indio Mahatma Gandhi, quien afirmaba:
"Mi consuelo y mi felicidad los hallo en estar al servicio de todas las
vidas".
Para otro grupo de pensadores, la vida es simplemente un misterio, algo de lo
que estaba convencido Napoleón y también el físico británico Stephen Hawking,
famoso por su libro "Una breve historia del tiempo.
Finalmente, un número más pequeño de los estudiados opinaron que la vida es,
simplemente, "una broma".
Entre ellos figuran personalidades también bastante distintas, como el
cantante Bob Dylan o el escritor Oscar Wilde.