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Un ama de casa debería cobrar 21.000 euros al año si su trabajo fuera remunerado |
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Estudios indican que se dedica un promedio de 53,8 horas semanales a las tareas
domésticas
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Agencias -El trabajo medio del ama de casa española vale 21.000 euros
(3,5 millones de las antiguas pesetas) al año si percibiera remuneración, según
estudios realizados por la Escuela Superior de Administración y Dirección de
Empresas (Esade) y que aporta el Grup d´Entitats Catalanes (GEC) de la Familia
tras contrastar y actualizar datos con las organizaciones familiares.
Tales cifras están calculadas con un trabajo doméstico de 40 horas semanales,
por lo que, según ha manifestado el presidente del GEC, Daniel Arasa, aún queda
por debajo de los valores reales, ya que el trabajo doméstico ocupa en realidad
muchas más horas. Los estudios indican un promedio de 53,8 horas semanales de
trabajo en casa, de las cuales 45,8 son las que la mujer dedica al trabajo del
hogar, 6,2 el hombre y 1,8 el resto de miembros de la familia.
La determinación del coste del trabajo del ama de casa se hizo utilizando
baremos similares a los de cualquier empleo, como el esfuerzo, la
responsabilidad, la experiencia y la complejidad. Hay que tener en cuenta que en
las tareas domésticas se ha generalizado el uso de electrodomésticos y de
diversos utensilios que para un uso adecuado exigen cualificación, en algunos
casos tanto como en muchas tareas profesionales.
Con todo, una encuesta del Instituto Vasco de Estadística (Eustat) señalaba que
si se contabilizara en términos económicos el trabajo del hogar, el Producto
Interior Bruto (PIB) del País Vasco se incrementaría en un 40%.
Recientemente, la presidenta del Instituto Catalán de la Mujer, Joana Ortega,
hizo una llamada al reconocimiento social de la labor del ama de casa, y afirmó
que no se trata de que ahora tenga que cobrar un sueldo, pero sí de que se le
reconozca el trabajo realizado y su importancia social.
Por su parte, el presidente del GEC, Daniel Arasa, añadió que el trabajo del
hogar "es un trabajo profesional como otro. La prueba evidente la tenemos en que
si una persona trabaja fuera de su casa atendiendo personas o limpiando, y
cobrando un sueldo, se le considera trabajo profesional. Y hacer lo mismo en la
propia casa, incluso con mayor intensidad y realizando más actividades, no se
cuantifica".
Arasa consideró positivo que haya desaparecido la referencia de "sus labores" al
trabajo femenino en el hogar y se hable de "amas de casa", aunque propugna una
plena implicación del hombre en las tareas domésticas.
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domingo, 25 mayo 2014 |
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