Antes de finalizar este mes, la Asociación de la industria discográfica
estadounidense, RIAA por sus siglas en inglés, procederá a presentar sus primera
demandas contra usuarios de servicios de intercambio de ficheros.
La Asociación basará sus demandas a través de las pruebas cosechadas a través de
estas redes y de las 1075 peticiones judiciales de información que han sido
remitidas a proveedores de acceso sobre individuos en concreto.
Estas se empezaron a enviar desde el pasado del 25 de junio, siendo rehusadas en
algunas ocasiones por los ISPs y centros a donde iban dirigidos, como en
el caso del prestigioso MIT o la Universidad de Boston.
Solo los más activos serán procesados
La RIAA, sin embargo, solo quiere llevar ante la justicia a un reducido número
de usuarios. Los más activos que "estan distribuyendo de manera intensiva una
gran cantidad de material", explico Cary Sherman, presidente de la
Asociación.
Esta reconoce, en una carta enviada al senador estadounidense Norm Coleman, que
viene usando un software que barre las redes de intercambio identificando al
usuario que los ofrece libremente.
El proceso es el siguiente, la aplicación descarga una pequeña porción del
archivo y segidamente identifica a través de la IP al usuario y proveedor de
acceso. Posteriormente un empleado de la Asociación verifica manualmente la
información cosechada para, después, remitir un mensaje a este usuario
Se han remitido ya millones de mensajes instantáneos a usuarios indicándoles
sobre la ilegalidad de su actividad.
El senador, presidente de una subcomisión de investigación, se mostró satisfecho
con las garantías con las que esta procediendo la Asociación.
Más dudas que respuestas, dice la industria de internet
No son del mismo parecer los responsables de sitios de intenet y de operadoras
que están siendo forzadas a revelar el nombre de los usuarios que intercambian
ficheros.
Un grupo que representa a un centenar de proveedores, entre ellos Yahoo!, afirma
que la carta que la RIAA esta remitiendo levanta más dudas que respuestas.
Agrupados bajo el nombre de NetCoalition, afirman que la RIAA debería
revelar como actua su software y también, cual es el proceso que se utiliza para
identificar a los usuarios. Estos también consideran que debería explicarse bajo
que argumentos se opta a la hora de iniciar acciones legales.
Junto a estos, también se han agrupado asociaciones de defensa de derechos
civiles y algunos congresistas. Consideran que la campaña de la RIAA y su
actuación podría violar la privacidad de las personas, así como encaminar
multitud de pequeños procesos por leves violaciones de derechos de autor.