Los canales básicos, es decir todos aquellos canales que oficialmente van
incluidos en la plataforma se convierten ahora en una opción de pago según el
paquete que el cliente elija. Y esta situación esta ya empezando a levantar
criticas por parte de los usuarios, principalmente aquellos que provenían de Vía
Digital.
A punto de finalizar el periodo de gracia, los clientes de esa plataforma están
recibiendo ya las cartas en que se les conmuta hacía el paquete equivalente al
que tenían contratado en Vía Digital. Así por ejemplo, aquellos que tenían
contratado Gran Via Max, que incluía los canales básicos más algunos de
cine, son automáticamente conmutados a Canal+ Cine, un paquete cuyo
precio es de 35,5 €. Pero la sorpresa proviene cuando los más de cuarenta
canales que pueden seguirse en abierto y que conforman el paquete básico
desaparecen de esa opción.
Así este se encuentra con dos opciones posibles, la primera contratar el básico
más tres canales de cine por 31€ o bien comprar el paquete completo, que le
permite ver Canal+ (teóricamente el que sustituye a Gran Via) por 44,5€.
Distintas organizaciones de consumidores y usuarios evidencian que las cartas
pecan de todo menos de claridad. Así lo expresa Alejandro Perales, presidente de
la Asociación de Usuarios de la Comunicación (AUC), en la revista Tele
Digital, es "preocupante porque las cartas enviadas por la plataforma a
los abonados no son lo suficientemente claras; los suscriptores, en especial,
los de Vía Digital, no tienen claro qué es lo que van a recibir de forma
definitiva". En este sentido, aboga por establecer una equivalencia para
los abonados a Vía Digital, en el sentido de que tengan canales parecidos a los
que han perdido a principios de mes, cuando la plataforma ha comenzado a
comercializar todos sus paquetes.
"Pero dicha equivalencia de canales es difícil de establecer porque los
acuerdos con las productoras de dichas señales aún no se han cerrado. Lo mismo
ocurre con los canales nacionales, como Antena 3, que se ha dejado de emitir en
la nueva plataforma, que ni siquiera se han planteado indemnizar a estos
abonados por dejar de recibir estas señales, siempre y cuando, los contratos
sigan vigentes", dice.
Para subsanar la falta de información, el representante de la AUC se compromete
a ser el canal de respuesta a todos estos conflictos y recoger todas las quejas
que les lleguen de los usuarios. "Nos hemos dirigido a la plataforma para
ofrecernos como medio de información a los usuarios pero sus responsables no nos
han hecho caso. Se han cerrado en banda y no estoy viendo ninguna voluntad de
información ni de transparencia por su parte", añade.
Por su parte, Antonio López, portavoz de la Confederación Estatal de
Consumidores y Usuarios (CECU) también es crítico con Digital+: " La
nueva plataforma tendría que dejar claro que, al menos durante dos o tres años,
las cosas seguirán igual para todos los que tenían firmados contratos con las
antiguas plataformas". Como consecuencia de estas deficiencias, asegura que
se multiplicarán las quejas de los abonados a Digital+ "porque la operadora
no está invirtiendo en cuidar a sus clientes; su centro de atención al abonado
funciona mal y por ello, pagará las consecuencias".Desde
Asociaciones de consumidores a algunos medios de comunicación se ha venido
insistiendo en el hecho de que la nueva plataforma ha alterado totalmente los
paquetes que venía ofreciendo, modificandolos de tal manera que incumple
claramente con la condición impuesta por el Gobierno de que la fusión no
conllevaría a un aumento de los precios. El monopolio y la falta de control por
parte de los organismos implicados demuestran como en España se sigue
considerando al consumidor como el tonto útil al que se le puede manipular sin
ninguna contemplación y sonsacarle todo el dinero que se pueda.
Mientras tanto el cliente deberá revisar atentamente a que paquete se abona, ya
que al precio de los paquetes que varían de entre 22 euros mensuales (sin cine)
hasta los 49,80 euros , deberá sumar la cuota del alquiler del decodificador,
otra clara imposición por el que lo acabas pagando diez veces por su valor, que
cuesta 7,99 euros mensuales. Tampoco es ninguna ganga ver una película, su
precio en modalidad pay per view es de 3,75 € y los partidos de fútbol tienen un
coste de mínimo de 12 euros. |