El 40 % de los argentinos sufre trastornos del sueño, en
parte porque la luz artificial prolonga el “efecto diurno”, y el 65 % de la
población de metrópolis de gran escalas, tales como Buenos Aires, San Pablo o la
ciudad de México, duerme menos de lo que necesita.
Este último dato, que surge de una encuesta que realizó la
Asociación Latinoamericana de Medicina del Sueño, alarma a los especialistas,
que advierten que la rutina del hombre contemporáneo -el famoso “abierto las 24
horas”, más la seducción noctámbula de Internet- ha roto la tradicional
separación entre el reposo y la vigilia.
Preocupados por los efectos nocivos y la falta de
relajamiento que genera la falta de sueño, los mismos expertos señalan que los
niños y los adolescentes, necesitan al menos nueve horas diarias de sueño, de
modo que si madrugan deberán acostumbrarse a dormir la siesta.
|