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Agencias - Dos pasajeros de uno de los trenes que explotaron
en Madrid reconocieron a uno de los sospechosos detenidos, el marroquí Jamal
Zougam, como uno de los que viajaban en el vagón. Los testigos, que no fueron
identificados, se trasladaban en el convoy que llegó a la estación de Atocha.
La policía sospecha que Zougam participó además en los ataques de mayo del 2003
en Casablanca, Marruecos. Además, se reveló que Zougam figura en la causa que
abrió el juez Baltasar Garzón por el atentado del 11 de septiembre de 2001.
La información la reveló ayer Jean-Charles Brisard, investigador de los abogados
de las víctimas de los atentados en EE.UU., quien vio el dossier de instrucción
de Garzón. Aludió a una conversación interceptada en agosto de 2001 entre
Abdulak al Magrebi y Barakat Yarkas, considerado responsable de una célula de Al
Qaeda en España, en la que el primero dijo: "Hay que contactar a Jamal y a su
hermano Mohamed Chaoui de Tánger".
La policía española asegura además haber identificado a otros cinco marroquíes,
cuyos nombres no fueron entregados, como autores materiales de los atentados del
11 de marzo. Asimismo, los investigadores consideran que la cinta de video
encontrada el sábado pasado, que reivindica los ataques en nombre de Al Qaeda,
"es auténtica".
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