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La prueba piloto, sin validez legal, se realizó en Zamora,
Toro
(Zamora), Pol (Lugo) y Jun (Granada), estaba planteada como un acercamiento a la
implantación de nuevas tecnologías para la e-democracia y el procedimiento
estaba articulado tal y como se haría en unas elecciones reales.
En el caso de Zamora, Toro y Pol, el proyecto desarrollado
por
Indra se realizó por Internet en puntos de votación dotados con ordenadores y de
los 300 ciudadanos a los que ofreció participar en la experiencia, 274
depositaron su voto en la urna virtual, lo que supone un índice de participación
del 91,3 por ciento.
A los participantes en la prueba se les entregó una tarjeta
inteligente en la que iba cargada su firma electrónica y que les daba acceso a
las pantallas de votación, en las elegía la opción
política a la que quería votar.
En el caso de Jun, el proyecto daba la posibilidad de votar a
través de Internet o a través de teléfono móvil. En el caso de la votación por
Internet, la acreditación de los ciudadanos se realizó a través de una
dispositivo criptográfico USB, mientras que en la votación a través de móvil, el
votante hacía su elección enviando una clave alfanumérica personalizada.
De las 800 personas acreditadas, un total de 597 personas
emitieron su voto en el proceso virtual, sin validez legal. Los ciudadanos se
decantaron por Internet, con un total de 400 votos emitidos, mientras que los
197 restantes utilizaron los mensajes cortos a través del móvil.
El proceso de votación siguió todas las pautas de un
procedimiento real, con la apertura y cierre de urnas en presencia de las
"juntas electorales virtuales" formadas al efecto. Los
miembros de estas juntas tienen unas claves que, sólo si están combinadas,
permiten abrir o cerrar la votación, para asegurar así la integridad del
proceso.
Las mismas fuentes también ser refirieron al buen
funcionamiento del recuento electoral del que fue responsable Indra y que se
realizó sin incidencia y en un tiempo récord.
A las 22:17 de la noche, escasamente hora y media después del
cierre de los colegios electorales en Canarias, se había escrutado ya el 85,10
por ciento de los votos, un porcentaje que se considera significativo para
avanzar con un alto grado de fiabilidad los resultados finales, señalaron
fuentes de Indra.
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