Los senadores anularon una enmienda de los diputados en la que se hacía responsable a los servidores de los contenidos pederastas, revisionistas y racistas que pudiera haber en las páginas internet de sus clientes.

La comisión de asuntos económicos de la cámara alta había considerado que esa disposición que había pasado el filtro de la Asamblea Nacional contravenía la directiva europea sobre el comercio electrónico e imponía una obligación desproporcionada a los intermediarios.

El redactado final al que dio visto bueno el Senado por unanimidad limita el filtrado al que deben conformarse los servidores para los casos en los que un juez les impone esa obligación de forma particular.

El ministro de Industria, Patrick Devedjan, que defendió el proyecto de ley durante la sesión, se comprometió a trabajar con los profesionales del sector para elaborar una "carta de buena conducta" para regular las prácticas que eviten la comisión de delitos.

Los senadores no hicieron cambios en otra disposición avalada por la Asamblea Nacional por la que se permite que los municipios actúen como operadores de telecomunicaciones para permitir que contribuyan a reducir las diferencias digitales entre territorios.

Una comisión mixta paritaria, formada por 14 diputados y senadores, se encargará a partir de ahora de armonizar los textos votados por la Asamblea Nacional y el Senado para fijar el redactado final de la ley.