La organización, que critica la "estrategia de desarrollo irresponsable" por
parte de los dos portales, anunció que ha pedido al Gobierno de Estados Unidos
que "imponga un código deontológico ara las empresas de Internet con actividades
en el extranjero".
Las autoridades estadounidenses "no ponen límite alguno a la actividad del
sector privado, incluso cuando colabora con los regímenes más represivos del
planeta", indicó RSF en un comunicado.
"Condenamos esta hipocresía y pedimos que sociedades como Yahoo y Google se
comprometan a respetar la libertad de información incluso en el extranjero",
añadió.
Según RSF, Google acaba de adquirir una participación en el buscador chino Baidu,
que "filtra" sus resultados y "sigue los pasos de Yahoo", "cuyo buscador se
pliega desde hace años a los deseos de Pekín".
Tras explicar que la organización escribió en diciembre pasado al director de
Yahoo, Terry Semel, para "pedir el respeto de los derechos de los internautas
chinos", sin obtener respuesta, RSF "pide hoy al secretario de Estado de
Derechos Humanos, Lorne Crane, y al de Asuntos Económicos y Comercio, Ear
Anthony Wayne, un código deontológico".
RSF denuncia que determinadas combinaciones, como "Tíbet libre", no ofrecen
resultados en el portal chino de Yahoo y de su nuevo buscador, Yisou, mientras
que en otras sólo aparecen las informaciones oficiales, como en el caso del
movimiento "falungong".
Google, que "hasta ahora se había negado a censurar su buscador, o que le había
costado permanecer paralizado una semana en 2002", "parece haber cambiado de
estrategia" tras su entrada en Baidu, uno de los mayores buscadores chinos, que
"filtra escrupulosamente los contenidos 'subversivos'", explica RSF.
La organización estima que "la censura de los buscadores de internet es un reto
clave para la libertad de expresión", ya que, según el último informe de la
agencia oficial encargada de la red el 80 por ciento de la información obtenida
a través de Internet en China es gracias a esa herramienta. |