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El Confidencial Digital/ Redacción - La decisión de la CMT de bloquear el servicio de “ADSL a la carta” propuesto recientemente por Telefónica ha provocado el enfado de algunos actores, incluido el ministro Montilla. Según ha podido saber ECD, el organismo regulador optó por aceptar las salvedades realizadas por Wanadoo (France Telecom), a pesar de la posición favorable de AUNA.

El origen de esta situación parece situarse en el larvado enfrentamiento que mantiene la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) y el Ministerio de Industria, de José Montilla. La última decisión de este organismo, al bloquear el servicio de “ADSL a la carta” de Telefónica, ha servido para echar más leña al fuego, sobre todo a medida que se han ido conociendo los pormenores de esa resolución.

Fuentes del sector han confirmado, que en la reunión del consejo de la CMT hubo una disposición favorable de AUNA a la propuesta de Telefónica y el rechazo, en cambio, de los representantes de Wanadoo, empresa propiedad de la operadora France Telecom.

Se critica, por tanto, la política de “seguidismo” de la CMT a intereses extranjeros, con el apoyo a una sociedad que actúa exclusivamente como proveedora de servicios, que nada invierte en el país y sale muy beneficiada de este bloqueo.

En Telefónica se lamenta el fallo de la CMT, teniendo en cuenta que se trataba de una oferta modular, es decir, que difícilmente se podrán llevar a cabo las otras dos propuestas aprobadas, ambas por 12 euros: la opción de ADSL de tarde-noche (de lunes a viernes, desde las nueve de la noche hasta las ocho de la mañana del día siguiente) y la de fines de semana (de viernes a las nueve de la noche a lunes a las ocho de la mañana).

Desde la sociedad que preside Cesar Alierta no se entiende que se penalice a la empresa capaz de generar un mayor crecimiento en la Sociedad de la Información de este país para favorecer a operadores públicos de otros países.

No es la primera ocasión

Desde la operadora española se sigue interpretando que la CMT tiene una especial fijación con su empresa y filiales. Así se insiste que la empresa se encuentra desarmada en cada ocasión que quiere lanzar nuevas ofertas comerciales y que compite en desventaja frente a otras empresas que apenas invierten en el sector.

También critica que Telefónica Móviles, que opera en un marco de completa competencia,  ha tenido que soportar un trato desigual frente a los otros operadores, que tienen iguales o mejores armas para competir, gracias a la legislación española, que beneficia a aquellas empresas por encima del antiguo monopolio.