La organización (MPAA, por su sigla en inglés) rehusó decir a cuántas
personas alcanza esta iniciativa legal, ni qué redes de intercambio de archivos
estaban usando.
Sin embargo, un portavoz de la asociación dijo en un comunicado que se trata
de demandas presentadas en todo el país, que irán seguidas de otras acciones
legales contra los usuarios que infrinjan las leyes de propiedad intelectual.
"La industria del cine debe perseguir acciones legales contra quienes
están robando nuestras películas en internet", dijo Dan Glickman, director
ejecutivo de la MPAA.
"El futuro de nuestra industria y cientos de miles de trabajos deben quedar
protegidos contra este robo", agregó Glickman.
La MPAA señaló que planea difundir un software gratuito para ayudar a los
padres y otros usuarios interesados a identificar toda la música, películas o
vídeo-juegos que procedan de redes de "usuario a usuario" o P2P.
La organización sigue así los pasos de la industria discográfica, que ha
demandado a miles de usuarios que utilizan redes como Kazaa o Morpheus para
intercambiarse música.
Las demandas vienen acompañadas de una serie de anuncios en los periódicos de
EEUU, desde pequeñas publicaciones universitarias hasta "The Wall Street
Journal".
Los anuncios dicen: "Si crees que puedes salir airoso después de traficar
ilegalmente con películas, piensa de nuevo".