Tardá ha tramitado un escrito en el cual solicita al órgano de gobierno del
Congreso que "reconsidere" la entrega de estos teléfonos móviles que
únicamente pueden manejarse en castellano y ofrezca a los diputados que lo pidan
"la posibilidad de acceder a aparatos que incluyan las otras lenguas cooficiales".
El diputado de ERC recuerda que en el mercado existen marcas que incluyen entre
sus servicios y aplicaciones el catalán, el euskera y el gallego, y vincula su
queja al debate abierto "a raíz del proceso que vivimos en esta misma Cámara
para reconocer la pluralidad lingüística del Estado y garantizar los derechos
que en este sentido deberían tener reconocidos los cargos electos".
En su opinión, y bajo esta perspectiva, "nos resulta incomprensible la
falta de sensibilidad que muestra el hecho de haber optado por un modelo de
teléfono que ignora la lengua catalana, el euskera y el gallego".
Además, Tardá dice que "existiendo en el mercado otras ofertas que
garantizan el respeto a las distintas opciones lingüísticas, tenemos que
lamentar que una vez más se haya ignorado a los no castellanohablantes".
Los nuevos teléfonos móviles de última generación adquiridos por el Congreso
fueron entregados a los diputados la semana pasada, dentro de un amplio plan de
modernización puesto en marcha por la Cámara Baja para mejorar los medios
materiales de los parlamentarios.
Estos terminales telefónicos cuentan con las prestaciones más modernas, de
manera que en el futuro podrán adaptarse a la red del sistema de tercera
generación (UMTS) y no quedarán obsoletos en pocos años.
Permiten el envío de mensajes multimedia, la inclusión de imágenes y
secuencias de audio, así como el acceso a Internet y al correo electrónico,
además de ser compatibles con las
recomendaciones y normativas internacionales
Telefónica Móviles la adjudicataria
El contrato fue adjudicado a Telefónica Móviles por un valor de 700.000 euros
anuales y para esta concesión se tuvo en cuenta la oferta más ventajosa para la
Cámara, atendiendo a la capacidad técnica y la oferta económica propuesta. De
hecho, Telefónica Móviles era la única compañía que incluyó en su oferta el
establecimiento de una tarifa plana para las llamadas nacionales por valor de 80
euros mensuales, condición que el Congreso había recogido en el pliego del
concurso. El número previsto de usuarios para este servicio está en torno a los
450, más 50 opcionales. |