Si usted habla inglés o alemán, con sólo copiar en su navegador esta
dirección www.beethoven-haus-bonn.de se le abre la puerta al riquísimo mundo del
compositor Ludwig van Beethoven: sus composiciones, partituras, esbozos,
ediciones de sus obras, así como documentos iconográficos y objetos varios.
El archivo a su alcance
La digitalización y puesta en red de más de 5000 documentos -escaneados con
altísima resolución y calidad, y acompañados de explicaciones y datos
científicos accesibles al gran público- , así como 1600 archivos de audio
permiten que “el pensamiento, la vida y el trabajo de Beethoven sean visibles y
audibles” para el internauta.
Así reza la sugestiva bienvenida a esta recién estrenada página web acerca de
uno de los mayores genios de la historia de la música.
Pero si estuviese en Bonn
Para cuando nació el famoso compositor alemán, en diciembre de 1770, en una
callejuela de la pequeña ciudad de Bonn a orillas del Rin, el abuelo de Ludwig
van Beethoven regentaba una bodega de vino, en un sótano oscuro y húmedo. En ese
histórico recinto, desde ahora funcionará la “Casa digital de Beethoven”, justo
al lado de su casa natal, convertida también en museo.
Adicionalmente el visitante tendrá acceso virtual a una de las casas en que
vivió Beethoven en Viena, ciudad en donde pasó buena parte de su vida.
Una gran inversión
Con la nueva oferta, el número de visitantes anuales del museo (alrededor de
100.000) va a ser centuplicado, por lo menos ésas son las expectativas de su
director, Andreas Eckhardt. La nueva oferta multimedial, con grabaciones
completas de todas sus obras, así como una presentación digital de la ópera
Fidelio en 3-D, ha costado 4,8 millones de euros a los que se adicionan los
costos de reconstrucción de la casa que la alberga.
Aparte del acceso digital, tanto por red como directo, a todos los documentos
del archivo del compositor de la popular Quinta Sinfonía, la nueva oferta del
museo incluye un “Escenario para visualización musical”, lo que significa que,
mediante novísimas tecnologías, se crea un espacio visual y acústico virtual, en
el cual se podrá asistir a las óperas beethovenianas.
#b#El Instituto Fraunhofer para Comunicación Medial se ha encargado de la
realización del virtual environment en tiempo real: dos grandes beamers
proyectan una imagen estéreo que el visitante puede percibir, gracias a lentes
especiales, en tres dimensiones. 17 altavoces, un subwoofer y un telón acústico
transparente se encargan de sumergirlo en la acción de una ópera con personajes
de luz.
Cuestión de gustos
“Plásticos y tangibles” son, según la información del museo, las imágenes y el
sonido que tiene a disposición el visitante. Si bien un Fidelio de bits, bites,
formas geométricas, haces de luz es para algunos la revelación mágica del futuro
del teatro y la ópera, para otros estos fantasmas virtuales sólo transmiten la
asepsia y el frío del porvenir tecnologizado. Como sea, todo parece indicar, que
una visita, por lo menos virtual, merece la pena. |