Las tres grandes fusiones anunciadas en los últimos días revolucionaron el
panorama empresarial de EE UU y contribuyeron a hacer de 2004 uno de los
periodos más activos en lo que se refiere a consolidaciones empresariales, según
Mergerstat, una consultora dedicada al análisis de estas operaciones.
Justo después de anunciar la compra de su rival PeopleSoft por 10.300
millones de dólares, el director ejecutivo de Oracle, Larry Ellison,
señaló que buscaba nuevas empresas que adquirir.
Esta declaración da idea de hasta dónde llegan las ambiciones de Ellison y,
por ende, del futuro de esta industria.
A esta adquisición, que se fraguaba desde hacía año y medio, siguió la de las
empresas de telefonía móvil Sprint y Nextel y, poco después, la de
Veritas -especializada en gestión de almacenamiento de información- y
Symantec, el fabricante de software para proteger los sistemas informáticos
contra los virus y otras amenazas.
Ello supone que las nuevas tecnologías (el software y, en el caso de Sprint y
Nextel, la telefonía móvil) entren en una fase similar a la de otras iniciativas
comerciales desde los comienzos de la revolución industrial.
En el caso del software, las consolidaciones se producen rápidamente debido a
que las empresas necesitan compañías capaces de lidiar con sistemas informáticos
cada vez más complejos y que abarcan más campos.
Esto supone que, en lugar de utilizar diferentes proveedores de software para
abastecerse, muchas empresas prefieren utilizar una sola.
La combinación de Symantec y Veritas, por ejemplo, da a sus clientes acceso a
soluciones informáticas que van desde la lucha contra los virus hasta la
recuperación de datos cuando los sistemas fallan.
"Nos acercamos a la regla de tres. En casi todas las industrias globales
tenemos una enorme consolidación", señaló Peter Sealey, profesor de la
Escuela de Negocios Haas de la Universidad de Berkeley (California).
En esta "lista de tres" ocupan los primeros lugares IBM y Microsoft seguidos,
en opinión de muchos expertos, de Oracle y su rival, la alemana SAP.
Lo que diferencia a las consolidaciones que se fraguan en Silicon Valley,
apuntan los expertos, es la velocidad.
"Los mismos avances en tecnología que han hecho que el ritmo de
innovaciones se incremente, han acelerado también el ritmo de las
consolidaciones en esta industria", dijo Bruce Judson, de la Universidad de
Yale, al "San Francisco Chronicle".
Judson pone como ejemplo lo ocurrido en el terreno de las búsquedas por la
Internet, un campo en el que, a pesar de su juventud, ya hay sólo tres grandes
participantes: Google, Yahoo y MSN, el buscador de Microsoft.
"A la industria del automóvil le llevó décadas conseguir el mismo nivel de
consolidación", señala Judson.
El futuro de las consolidaciones no está claro, ya que estudios como los de
Mergerstat muestran que entre el 50 y el 70 por ciento de las operaciones
fracasan debido a que incumplen las promesas financieras en que se basaron.
De lo que hay pocas dudas es de que pocas veces ocurren sin causar trastornos
para los trabajadores y clientes.
En la mayor parte de los casos, este trastorno es para los empleados que
resultan despedidos, como fue el caso en la fusión de la informática Hewlett-Packard
con Compaq, o como probablemente sucederá, apuntan los analistas, con Oracle y
PeopleSoft.
En otros casos, cuando el pez grande se come al pequeño, son los clientes los
que sufren las consecuencias de la falta de competición, que se traduce en un
aumento de los precios y menos innovación. |