Desde el 10 al 16 de marzo, 6.270 expositores revelan en el recinto ferial de
esta ciudad germana novedades en sectores de software para informática, tanto
para el uso privado como empresarial, de telefonía móvil, incluida la recién
lanzada tercera generación (UMTS), internet y electrónica para el hogar. Tras
tres años de retroceso en el número de expositores, Hanover vuelve este año a
niveles próximos a los de 2001 gracias, ante todo a la fuerte presencia
asiática. Sólo Taiwán acude a la cita con 777 empresas.
A estas alturas ya se perfila el poder que concentran los proveedores de
contenidos digitales en medios como la banda ancha de internet, televisión por
cable y la telefonía móvil que permite la descarga de material audiovisual.
Cada vez se advierte con más claridad la fusión de campos antes tan
distanciados como el teléfono, la televisión e internet, cuando ya han
aparecido los primeros suministradores de acceso a internet, una tendencia que
aprovechan este año estas empresas para mostrar su
oferta en la Cebit.
Así, la telefonía por internet (VoIP), que es posible gracias al acceso a
internet con el sistema de banda ancha ADSL, se considera como un producto con
brillante futuro por el bajo coste de las llamadas, pese a los problemas
técnicos iniciales y la complicación de tener que montar un adaptador y
auricular especiales.
Tras la explosión de la burbuja tecnológica en bolsa en 2000, la mirada está
puesta de nuevo en una fuerte expansión de ADSL en mercados tan importantes
como Alemania, donde en 2004 ya había siete millones de abonados a esta
tecnología. Para 2010, se prevé que esta cifra crezca hasta 17 millones de
suscriptores.
Mientras algunos expertos creen que la telefonía móvil desplazará pronto a
la fija o que persistirá una combinación de ambos sistemas, otros piensan que
la velocidad más elevada para el acceso a internet será un criterio básico que
favorecerá por un tiempo al teléfono doméstico.
Las operadoras de telefonía fija propugnan la fusión con la de móviles
mediante nuevas tecnologías, mientras las compañías de móviles intentan
arrebatar cuota de mercado al aparato doméstico con precios cada vez más bajos.
Simultáneamente, la rápida propagación de televisores de pantalla plana,
tanto de cristal líquido como de plasma, facilita la integración de aparatos
con conexión digital, desde el ordenador personal y el equipo estereofónico
hasta un adaptador inalámbrico (W-Lan) de internet.
Además, la multifuncionalidad de los ingenios electrónicos permite combinar
teléfonos que llevan cámara fotográfica incorporada con la gestión de correo
electrónico mediante un miniteclado integrado.
En móviles, el fabricante norteamericano Motorola exhibirá en Hanover el
terminal de UMTS E1120 con cámara fotográfica de una resolución de tres
megapíxels, sin precedentes en Europa, lo que pronto puede hacer innecesaria la
adquisición de una cámara digital.
Los ordenadores portátiles tampoco se escapan a esta moda y añaden a sus
funciones tradicionales opciones multimedia como receptor de televisión digital
terrestre, teléfono móvil y pantalla sensorial dactilar, además de lector de
DVD para películas y de CD para música en formato populares como MP3.
A propósito de televisión digital, aún no se ha establecido la
legislación en varios países como España, pero en Alemania esta tecnología ya
cuenta con muchos adeptos y tiene una cobertura actual para 45 millones de
televidentes. En 2010, la recepción terrestre habrá sustituido definitivamente
la recepción analógica.
Los fabricantes están convencidos de que la profusión de la digitalización y
la implantación de la red de banda ancha en el hogar impulsarán el negocio de
la electrónica de consumo y de sistemas que operan con procesadores.
La videotelefonía, que no acababa de despegar, tras múltiples intentos
fracasados de comercializarla, cuenta con una nueva baza gracias al acceso a
internet de banda ancha y se le abre otra posibilidad mediante las cámaras web
conectadas a ordenadores personales y los terminales de tercera generación de
móviles (UMTS).
La descarga de vídeos y filmes por internet, aún minoritaria con los
recursos actuales, está a la vuelta de la esquina, lo que revolucionará la
distribución cinematográfica y los derechos de
autor. Quizás, el primer resultado visible de esta metamorfosis sea la
paulatina desaparición de las tiendas de alquiler de vídeos.
Con la señal de radio transmitida a distintas frecuencias y tecnologías
(W-LAN, Bluetooth, telefonía móvil, Wimax) también desaparecerá el incordiante
cableado para todos los ingenios necesarios para recibir y transmitir datos
electrónicos. |