La muerte y trayectoria de Karol Wotjyla dominó la
programación televisiva como ningún otro hecho informativo lo ha hecho hasta
ahora. Tanto es así que el espectador pudo sentirse abrumado ante el torrente de
información sobre el Pontífice. Según datos de Corporación Multimedia, uno de
cada cuatro españoles siguió el sábado por la noche la noticia de la muerte de
Juan Pablo II por televisión. Más de diez millones y medio de espectadores,
concretamente 10.537.000, lo que se traduce en el 25,3% de la población, estaban
delante de la pequeña pantalla entre las 21,55 y las 22 horas, cuando se conoció
el óbito.
TVE 1, que fue la primera en dar la noticia el sábado, a las 21.55 horas, cuando
estaba emitiendo un reportaje sobre Rainiero III en Informe semanal, ha
permanecido desde entonces volcada con el fallecimiento del Santo Padre y el
luto que se vive en todo el mundo, mientras que las privadas Antena 3 y
Telecinco reanudaron su habitual programación el domingo, aunque en todo momento
estuvieron y siguen atentas a lo que ocurre en Roma.
Telecinco ofreció el domingo la retransmisión matinal del Gran Premio de Bahrein
de Fórmula 1 en la que Fernando Alonso se alzó con la victoria, prueba que
sintonizó con más de cinco millones de espectadores. Fue la única cadena que no
emitió la misa dominical en recuerdo del Papa, multitudinaria ceremonia a la que
sí asistió Antena 3, que dedicó el magacín Espejo público a la muerte de Juan
Pablo II. |